BBK no firma el convenio al no contar CCOO con mayoría, al contrario que Vital y Kutxa
Juanjo BASTERRA | BILBO
El acuerdo laboral entre CCOO, Pixkanaka y Grupo Independiente Vital (GIV) con los representantes de BBK, Vital y Kutxa no cuenta con la mayoría sindical suficiente en la caja vizcaina, por lo que no se podrá firmar el convenio. En cambio, sí se ha firmado en Vital y en Kutxa. De esta manera, la mayor caja se queda fuera del acuerdo que las tres entidades firmaron en plena negociación de Kutxa Bank.
En Kutxa, CCOO y Pixkanaka validaron el acuerdo que no reconoce el ámbito vasco de negociación colectiva. En Vital también lo han firmado, con CCOO y GIV. En BBK, el sindicato independiente ALE de la expansión ya se pronunció en contra del acuerdo, como publicó este diario el 22 de setiembre. Aunque la dirección de la caja vizcaina ha intentado desbloquear esa situación, no lo ha conseguido.
La validación de los acuerdos laborales en Kutxa y Vital genera, por otro lado, una incertidumbre, ya que la actividad financiera de las cajas desaparece este próximo 31 de diciembre y pasan a ser Kutxa Bank. El acuerdo pactado por los responsables de las tres entidades, CCOO, Pixkanaka y el Grupo Independiente Vital (GIV) es un convenio trianual, aunque a partir de enero se debería negociar un convenio en Kutxa Bank, donde debería incluirse la cláusula pactada entre los presidentes de las tres cajas y Bildu para que la plantilla sea la que decida el ámbito de negociación colectiva.
En Kutxa, la sección sindical de LAB explicó ayer su rechazo a la firma del convenio por diferentes motivos, pero destaca que «mantiene y aumenta la injusta discriminación entre trabajadoras y trabajadores nuevos y veteranos». Se pregunta si «no había llegado el momento de acabar con esto», dado que la «degradación entre la plantilla más joven está aumentando respecto a BBK y Vital».
Recurda que presentó una iniciativa para «disminuir las diferencias salariales actuales entre los niveles superiores y más bajos de la plantilla», pero no prosperó. «Fue rechazada, y no sólo por la dirección de la empresa». Otra propuesta de LAB que quedó en el olvido fue la iniciativa para que en Kutxa se aplique una jornada similar a BBK, «es decir que los jóvenes trabajaran una tarde a la semana desde octubre, en vez de cuatro. Fue rechazada y aplazada a 2013, cuando la aplicación a los nuevos empleados contratados por Kutxa Bank estará vigente desde el 1 de enero de 2012. Una paradoja bochornosa», a juicio de la central.
Ante el rechazo a la anterior medida, reclamaron «no trabajar las tardes en vísperas de fiesta, nueve en 2012, pero tampoco se aceptó por parte de Kutxa», agregó LAB. Tampoco firmaron porque «en este séptimo convenio se sigue sin concretar la incorporación de 45 compañeros que superaron las oposiciones para incorporarse con contrato indefinido». Y, por último, LAB reconoce que no firma porque «se impone el marco estatal de negociación colectiva».