El Betis llega a Iruñea
Otra asignatura a superar
Después de haber conseguido su primera victoria de la temporada a domicilio, con una situación comodísima en la clasificación, y un rival que atraviesa horas muy bajas enfrente, el equipo navarro regresa a casa con la exigencia de no caer en el exceso de confianza.
OSAUNA - BETIS
Amaia U. LASAGABASTER
Osasuna consiguió el pasado domingo en Cornellà su primera victoria de la temporada a domicilio. Un triunfo que le ratificó en la zona alta de la clasificación, pegadito a posiciones europeas. Situación que corresponde, en cierta manera, a las expectativas creadas en una buena pretemporada pero por la que, probablemente, pocos se habrían atrevido a apostar durante el verano.
Pero siempre hay algo que mejorar. Y el equipo navarro no es una excepción. Si ante el Espanyol tocaba mejorar el rendimiento a domicilio, ocho días después la asignatura es otra, consecuencia en buena medida de haber aprobado la anterior.
Concretamente, el peligro de caer en un exceso de confianza, con sus habitualmente negativas consecuencias, tras haber conseguido un éxito inhabitual y con una excelente situación clasificatoria como recompensa.
Más aún teniendo en cuenta la fortaleza de Osasuna en El Sadar -tres victorias y tres empates esta Liga-, a lo que se añade que a Iruñea llega un equipo con poco cartel y en pésima racha. Demasiadas circunstancias a favor y, por lo tanto, en contra.
José Luis Mendilibar reconoce que «no es bueno venir de ganar fuera y estar en buena situación». Parece un contrasentido, pero el propio técnico lo explica: «Nos relajamos». Por eso ha intentado a lo largo de la semana que «la gente no se relaje y se entrene con intensidad. No tenemos que pensar que somos mejores de lo que somos».
Entre otras cosas, porque el Betis tampoco es tan malo como dicen sus últimos resultados -un solo punto en nueve jornadas-. «Es un buen equipo que ascendió sobrado. Luego empezó la temporada muy bien, con un estilo de juego que ha mantenido, aunque sus últimos resultados no hayan sido buenos. Aunque, de todos modos, creo que han merecido bastante más de lo que han tenido». No anda, de hecho, el Betis tan lejos de los rojillos. «Si nos ganan se nos ponen a dos puntos... Entonces tendré que empezar a sufrir yo -sonríe Mendilibar-. Ahora es Mel y luego yo. Es una situación normal en un equipo recién ascendido».
Para evitar ese traslado de las angustias, el entrenador vizcaino considera fundamental la actitud con la que su equipo encare el encuentro. «Si empezamos pensando que somos mejores, nos ganan. Pero si empezamos apretando y jugando en su campo, seguro que tendremos opciones de ganar, aún sabiendo que ellos tienen un buen equipo a la contra. Pero dependemos más de lo que hagamos nosotros que de lo que hagan ellos», insistió.
Variaciones
De ahí que conceda la importancia justa a la aparente decisión de Pepe Mel -quién sabe si para complacer a los mandamases verdiblancos, que le pedían un cambio de esquema- de variar su forma de juego. «Creo que si solo cambias para un partido, normalmente no te sale, pero no sé», dice el zaldibartarra. Pero su homólgo bético parece tenerlo claro. «El lunes me preguntaron si tenía soluciones. El domingo vamos a probar una solución que creo que va a servir para ganar el partido», adelantó. Y no es por los recados que le hayan podido llegar desde arriba, sino que «por primera vez, el rival va a condicionar al Betis». Es decir, que Mel considera imprescindible «hacer algo para que las virtudes de Osasuna se vean mermadas: sus transiciones rápidas, sus segundas jugadas fuertes, etc. Vamos a intentar mejorar».
Más preocupado por lo suyo que por lo de los demás, Mendilibar también estudia posibilidades y variantes. Lo que no hace es resolver la gran incógnita. El técnico, finalmente, no pudo incluir a Sergio y Marc Bertrán en la convocatoria, pero sí a Jukka Raitala, que recibió el alta médica. Ahora bien, no está nada claro si el lateral zurdo será para el jugador finés o para Roversio, con quien el vizcaino ha estado probando en los últimos días. Mendi, como de costumbre, no da pistas. «Tengo variantes, aunque penséis que no. Siempre hay gente que se puede adaptar a todo».
En lo que respecta al resto del once, todo parece indicar que se repetirá el de Cornellà, con la excepción de Satrustegi, sancionado, en ese lateral zurdo y la de Ibra al que, previsiblemente, sustituirá Nino.
Patxi Puñal, salvo sorpresa, alcanzará hoy los 351 partidos en Primera y los elogios hacia su persona se suceden en las horas previas.
Ayer le tocó a Patxi Izco, en cuya opinión el capitán rojillo «es el mejor ejemplo de que no hace falta que pase el tiempo o que alguien se retire para considerarlo un mito o una leyenda de un club». El presidente de Osasuna destacó especialmente la identificación de Puñal con la esencia del club. «Los valores históricos de Osasuna están empapados en su camiseta antes, durante y después de cada partido. «Amar los colores» es una frase en desuso en estos tiempos, pero jugadores como Patxi son una sana excepción: cada día, en cada entrenamiento y en cada partido, nos demuestra que detrás de este negocio multimillonario con tantos intereses, tanto divo y tanta tontería, sigue habiendo personas honestas y comprometidas por las que merece la pena bajar al campo.
También José Luis Mendilibar se refirió a Patxi Puñal, en cuya opinión «se merece» el homenaje que recibirá hoy en los prolegómenos del encuentro, cuando Javier Castañeda -el rojillo con más partidos en Primera hasta ahora- le ofrezca un roble que se plantará en Tajonar. «Los homenajes se hacen porque alguien se lo merece y mucho más con su trayectoria. Llegar a donde ha llegado y estar el tiempo que ha estado tiene mucho mérito. Hay súper hombres que les soplas y se caen. Patxi, no. Y si se cae, se levanta. Se merece todo lo que le hagan», subrayó el técnico.
A.U.L.