El Caja Laboral Baskonia se toma la revancha en Miribilla con una canasta sobre la bocina
Quien haya parpadeado, se habrá perdido el triple decisivo
San Emeterio volteó un derbi que parecía para los locales tras un gran último cuarto. Brillaron Jackson, Teletovic, Prigioni y Vasileiadis.
BILBAO BASKET 79
BASKONIA 80
Arnaitz GORRITI
Los partidos entre Gescrap Bizkaia Bilbao Basket y Caja Laboral Baskonia pueden ser mejores o peores, pero siempre son apasionantes. Por la intensidad de los protagonistas, por la motivación que los mueve, no es recomendable perderse ni un segundo, no vaya uno a perderse una jugada bonita, polémica, o decisiva. Como el triple sobre la bocina de San Emeterio.
El último curto disputado por ambos equipos es testigo del primer párrafo. Bilbao Basket caía por 63-70, pero entró en ebullición logrando un parcial de 10-0. El Baskonia parecía perdido cuando, de la mano de Jackson y Vasileiadis, los hombres de negro se adelantaron 72-67, pero San Emeterio, Teletovic y Prigioni dijeron que basta de derrotas ante los hombres de negro, y volvieron a poner a los suyos en cabeza, 74-75.
Pero Jackson anotó el 76-75, y Teletovic, pese a sus 24 tantos, erró dos tiros libres que Vasileiadis anotaría después. El heleno anotaría un tiro libre más, después de que Prigioni pusiera el 78-77. Con 79-77, Prigioni subió el balón y encontró libre en la esquina al alero cántabro, que con ocho décimas «de sobra», enmudeció Miribilla con un buzzer beater de antología.
El primer arranque, empero, fue de los bilbainos, con tres triples seguidos de Blums, adelantando a los suyos 16-8. Pero el letón cometió su segunda falta, y su ausencia lo notó Bilbao Basket, que vio cómo su vecino le endosaba un parcial de 0-9 a base de tiros libres y el buen hacer de Milko Bjelica y Oleson. El tiempo muerto bilbaino surtió efecto, y los de Katsikaris lograron ponerse arriba, 23-22.
Del chaparrón anotador del primer cuarto se pasó a un segundo cuarto sin puntos durante casi cinco minutos. Un triple de Mumbrú -el número 500 que logra en la ACB- rompió el cero, pero no fue el badalonés el protagonista de este segundo período, sino Mirza Teletovic. El capitán baskonista, dispuesto a desquitarse de su mal partido de Euroliga, anotó 11 puntos y machacó a Banic. Una canasta de Nemanja Bjelica dejaba el derbi 36-39 al descanso.
A contracorriente tras la técnica
Como le sucediera al Baskonia en la Euroliga, Bilbao Basket se tuvo que mover a contracorriente tras el descanso. Un tapón legal de Fischer sobre Prigioni fue sancionado con falta al pívot estadounidense y técnica a Banic. A partir de ahí, el Baskonia abrió brecha, logrando irse hasta de 10 puntos: 47-57. La reacción bilbaina no detuvo a los gasteiztarras, que parecían tener el derbi encarrilado con 53-60 al final del tercer cuarto.
Luego llegó la gran reacción local, con Miribilla llevándolos en volandas, y el indomable carácter de un San Emeterio que se tomó su propia revancha.
Después de la derrota de ayer, Gescrap Bizkaia Bilbao Basket debe hilar muy fino si quiere ir a la Copa. De los cinco partidos que le restan, los hombres de negro precisan ganar cuatro. El primero, el miércoles que viene, en la cancha del Unicaja.
Es conocido que el nuevo pabellón Fernando Buesa Arena tendrá la capacidad de albergar hasta 15.000 espectadores. Así las cosas, las 8.510 localidades del Iradier Arena se antojaban algo ajustadas.
No obstante, la cancha provisional del Caja Laboral Baskonia ha registrado una asistencia media de 8.057 espectadores en los once partidos, seis correspondientes a la Liga ACB Endesa y otros cinco de Euroliga. Es decir, aunque ha mantenido el tirón de sus incondicionales, el conjunto azulgrana no ha sido capaz de llenar las mencionadas 8.510 localidades.
La mejor entrada de la plaza de toros gasteiztarra fue el pasado 16 de noviembre, día en el que se disputó el primer derbi vasco de la historia de la Euroliga. Aquella jornada, el Iradier Arena presentó un lleno casi absoluto; casi: 8.460 espectadores. La segunda mejor entrada fue el duelo liguero ante el Valencia Basket, el 23 de octubre, donde se reunieron 8.442 espectadores.
De hecho, la media de aficionados es ligerísimamente inferior a los 8.000 en los duelos de competición doméstica: en total, 7.970. La peor entrada se registró en el estreno liguero, ante el Cajasol, el 8 de octubre, con 7.600 espectadores.
Por su parte, Josean Kerejeta lamentaba ayer en un encuentro con periodistas la «mala suerte» de su equipo y expresaba su deseo de que el Baskonia sea capaz de competir en la Liga y la Copa.
Lamentó la «mala suerte» del fichaje del lesionado Maciej Lampe, del que espera que pueda incorporarse «a mediados de enero». Este contratiempo, aparte del fugaz fichaje de Reggie Williams, supuso tener que traer a Seraphin y Dorsey. El francés ya está en la NBA y el de Baltimore no cuenta en los planes de Dusko Ivanovic. A. G.
El FIATC Joventut pudo con el Real Madrid por 78-75 en un duelo emocionantísimo. Tras de ir por detrás todo el partido, Llull adelantaba a los visitantes por 74-75 a falta de 45 segundos, pero una canasta de Jelinek y dos tiros libres de Oliver voltearon el resultado para la Penya.
El escolta estadounidense del CAI Zaragoza Bracey Wright logró el último galardón de MVP de 2011. El jugador de la escuadra maña logró una valoración de 40, al sumar 28 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias y 2 robos. Su equipo superó al Obradoiro por 80-71.
