La renuncia del aspirante a alcalde de Garinoain es significativa no solo por ser el candidato a la alcaldía, sino porque, además, el tafallés Gonzalo Vicuña es el edil más cercano a ese pueblo y, por tanto, el mejor conocedor del entorno y sus gentes. El resto de ediles «electos» de la ultraderechista DNE, ya que no se han preocupado de informarse de las características de esa «tierra a conquistar», deberían ahora tomar ejemplo de su cabeza de lista y dejar libre el paso a una representación real del pueblo, a una corporación que represente a ese 95% al que en modo alguno pueden representar ellos por el mero hecho de haber recibido el %5 de los votos. Para hoy está convocado el pleno para elegir alcalde, pero también una concentración de vecinos y vecinas, al igual que el pasado viernes -cuando no se celebró el pleno de investidura debido a la ausencia al aspirante a alcalde-, que dejaron claro de forma masiva que no están dispuestos a aceptar una corporación de gente ajena al pueblo en todos los sentidos. Está por ver si la actitud del resto de «electos» de Garinoain es imponer su «democracia» a todo el pueblo o si hacen gala al menos de un mínimo de vergüenza.