Taiwán votó ayer por el mantenimiento de la política de distensión y acercamiento económico a China del presidente saliente, Ma Ying-jeou, y le reeligió con el 51,6% de los votos frente al 45,7% de la candidata independentista Tsai Ing-wen, según los resultados oficiales.

«Es una victoria de la prosperidad económica... y un respaldo para mis políticas», dijo Ma, que prometió seguir trabajando por la paz y la estabilidad de la isla y los lazos con China, y por acortar la brecha entre ricos y pobres.

Tsai, empatada en los sondeos previos, dimitió como presidenta del Partido Demócrata Progresista (PDP) y pidió al presidente que «esté atento a los deseos del pueblo». «Su propuesta de basar los lazos con China en un consenso previo de alta participación social ha asustado al empresariado y ha sido clave en los resultados», dijo la exvicepresidenta Annette Lu e destacada dirigente del PDP.

Beijing y Washington siguieron de cerca los comicios por su posible impacto en la estabilidad de Asia Oriental, dado el conflicto de soberanía entre China y Taiwán y la oposición china a las propuestas de Tsai. Aliviados por la decisión de los taiwaneses, China valoró positivamente la reelección de Ma y EEUU se pronunció por el acercamiento entre Taipei y Beijing, felicitando al nuevo presidente electo, partidario de estrechar lazos con la China continental.

El empresariado isleño también sintió alivio con la victoria de Ma, indicó Efe, al considerar que la victoria de Ma impulsa la estabilidad en los lazos con China y el crecimiento económico.

En las elecciones legislativas, el KMT de Ma logró la mayoría absoluta, al conseguir 48 escaños frente a 27 del PDP en los comicios de los 79 distritos, y el 44,5% de los votos frente al 34,6 % del PDP para la distribución proporcional de 34 escaños nacionales.