El ex presidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrinch se proclamó vencedor ayer de las elecciones primarias republicanas en el estado de Carolina del Sur al recabar el 41% de los votos y derrotar al favorito según los sondeos Mitt Romney que quedó en segundo lugar con el 28% de los votos.

En un discurso triunfalista, el ganador, recibido con el himno populista que tanto éxito ha tenido durante la campaña, atacó a las élites, a los medios de comunicación y al presidente estadounidense Barack Obama, a quien acusó de provocar «una catástrofe» en el país.

A su vez, dijo que su victoria en Carolina del Sur se produjo porque los estadounidenses «piensan que las élites de Washington y Nueva York no los entienden, no se preocupan por ellos, no son dignos de confianza y no los representan en absoluto».

Por su parte, Mitt Romney, que contaba con ganar en este Estado, reconoció su derrota y declaró que la carrera iba a ser «larga» y «más interesante». El exgobernador de Massachusetts, que interpreta a la perfección esa élite que critica Gingrich, se mostró convencido de que acabaría frente a Barack Obama en las elecciones presidenciales del 6 de noviembre.

A pesar de su organización incomparable y sus medios de financiación, Romney ha sido víctima en los últimos días de la campaña electoral, sobre todo por la controversia sobre su declaración de la renta.

Continua la lucha

Ambos candidatos están muy por delante del ultraconservador católico Rick Santorum y del ultraliberal Ron Paul, que obtuvieron el 17% y el 13% de los votos respectivamente. Ambos prometieron continuar hacia Florida en la lucha por la candidatura presidencial republicana. «Tres estados, tres ganadores. Qué gran país», dijo Santorum en un breve discurso, al referirse a los comicios republicanos celebrados hasta la fecha en Iowa, Nuevo Hampshire y los últimos en Carolina del Sur.

Por su parte, desde la capital de Columbia, Paul, también prometió seguir luchando y repitió su consabido recetario de conceptos libertarios. «El mensaje de la libertad está siendo recibido por cada vez más personas cada día...y es algo que por supuesto seguiremos promoviendo» aseguró en su discurso.

Gingrich, Romney y Santorum competirán ferozmente en las primarias de Florida en nueve días. Paul ha decidido centrarse en los «caucus») de Nevada, el 4 de febrero. Hasta ahora Romney lleva 31 delegados, cinco más que Gingrich, antes de llegar a Florida, donde se juegan con 50 delegados, del total de 1.144 que se requiere para lograr la candidatura en la convención nacional del partido en agosto en Tampa (Florida).