La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, dio ayer cuenta de algunos de los aspectos incluidos en la reforma laboral que se aprobará este viernes en el Consejo de Ministros, si bien no desveló las decisiones más espinosas. Así, algunas de las medidas que impulsará el PP se centrarán en limitar las prejubilaciones, así como compatibilizar el cobro de una pensión y la continuación en el mercado laboral.

Báñez explicó en su primera comparecencia en el Congreso de Diputados que la reforma del PP quiere disminuir el número de prejubilaciones limitándolas a «circunstancias muy excepcionales». En este sentido, argumentó que más del 50% de las nuevas jubilaciones en el Régimen General se producen antes de los 60 años.

Asimismo, apuntó que se trabajará para favorecer la prolongación «voluntaria» de la vida laboral y, de este modo, compatibilizar el cobro de una pensión parcial y la continuación en el mercado laboral. Según Báñez, con esta medida se otorgará «libertad de elección» sobre la jubilación.

Ante las críticas suscitadas entre la oposición, la titular de Empleo y Seguridad Social negó que vaya a alargarse la edad de jubilación de forma obligatoria, aunque matizó que «el PP ha defendido siempre alargar voluntariamente la edad de jubilación con incentivos».

Por otro lado, defendió que la pensión debe ser más proporcional a la cotización de toda la vida laboral y reiteró la necesidad de que se siga trabajando más allá de la edad legal de jubilación. Cabe destacar que solo el 6% de los trabajadores que se jubilan prolongaron voluntariamente su vida laboral.

Seguridad Social

Báñez también se refirió al sistema de la Seguridad Social y afirmó que su equipo modificará el proyecto de «transformación organizativa» a través de la creación de una agencia estatal.

Añadió que aunque la Seguridad Social presenta «fortalezas», ha entrado en déficit después de años de crisis económica. Por ello, consideró necesario un proyecto de ley que supondrá la «integración de las principales funciones y la puesta en marcha de adaptaciones y modernización de los procesos».

Por otra parte, anunció la intención de presentar un proyecto de ley para las mutuas por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales de la Seguridad Social tras una ronda con los agentes sociales. El objetivo será «reconducir la situación» de estas entidades «tras una etapa de enorme intervencionismo que ha llevado al sector a una difícil situación».

Críticas y promesas

Ante las críticas de diferentes miembros de la oposición por la falta de claridad en torno a las reformas, Báñez aseguró que la reforma va ser «completa, equilibrada, operativa y útil».

El diputado de Amaiur Sabino Cuadra denunció que estas medidas suponen «una profunda desestructuración del mercado de trabajo y un importante salto en la flexibilización de las relaciones laborales tendentes a recortar y abolir muchos de los derechos y conquistas sociales alcanzadas mediante la lucha en los últimos cincuenta años». Cuadra opinó que el Gobierno del PP pretende «aprovecharse de la crisis para reforzar las competencias centralizadoras del Estado» y reivindicó la necesidad de un marco soberano en materia económica y social.