La organización juvenil Iratzarri decidió ayer desvincular su proyecto al del partido político Aralar. La decisión se tomó en una reunión mantenida por los afiliados en Hika Ateneoa de Bilbo y con ella Iratzarri pretende «recuperar su independencia como organización juvenil para actuar sin subordinarse a lógicas electorales» que, en su opinión, «desestiman la pluralidad de la juventud abertzale y de izquierdas».

Según se recuerda en la nota, Iratzarri ha sido desde su activación en 2007 una organización por la que han pasado «decenas de jóvenes bajo los principios y la cultura política de una nueva izquierda abertzale civil y plural. Durante ese tiempo, Iratzarri ha sido, por voluntad propia, el único referente joven de Aralar. Con la decisión tomada, Iratzarri ya no es a nivel nacional la organización juvenil del partido político Aralar. Los militantes de Iratzarri que estén afiliados a Aralar, condición que siempre fue opcional, podrán seguir estándolo, en función de su decisión personal».

Con esta decisión, Iratzarri deja de ser la organización juvenil de Aralar pero «seguirá siendo políticamente un espacio de participación y formación para jóvenes de izquierdas y abertzales que apuestan por la defensa de los derechos sociales, económicos y culturales, el euskara, el ecologismo, el feminismo y las vías civiles y políticas hacia la independencia». En este sentido, afirma que aspira a continuar potenciando el activismo y las formas de lucha creativas en un contexto «muy duro para la juventud, el cual quiere contribuir a transformar».

Iratzarri valora el trabajo realizado por el grupo parlamentario de Aralar y su portavoz en la Cámara de Gasteiz, Aintzane Ezenarro, al tiempo que destaca la importancia de Nafarroa Bai para «el avance del abertzalismo» en Nafarroa. Ezenarro ha sido una de los voces más críticas de Aralar hacia la política de alianzas electorales que unió a esta formación con la izquierda abertzale, EA y Alternatiba en la coalición Amaiur, abandonando la marca Nafarroa Bai que se empleó en este herrialde en las elecciones de mayo de 2011.

Iratzarri afirma que seguirá trabajando por la creación de espacios de debate abiertos y plurales que «eviten las diferencias políticas, por profundas que sean, generen odio y violencias como ya ocurrió en generaciones anteriores».