Alduntzin confía en poder alargar el convenio para trasladar residuos a Bizkaia
El diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Juan Carlos Alduntzin, pedirá la prórroga del acuerdo que permite llevar parte de los residuos del territorio a Igorre y afirmó que la incineradora no era un condicionante.GARA | DONOSTIA
El diputado guipuzcoano de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Alduntzin, anunció ayer que el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) solicitará en su próxima asamblea una prórroga del convenio que permite trasladar basuras de este territorio a Bizkaia y que concluye el próximo mes de mayo. Además, recordó que este convenio incluye la posibilidad de prorrogarlo durante tres años más, «dado que la planificación de las infraestructuras de gestión de residuos de Gipuzkoa no preveía su finalización antes del 2015».
Según Alduntzin, el actual Gobierno de Bildu no «ha variado» esta cuestión, porque «tiene en su planificación finalizar» sus infraestructuras en 2015. Por este motivo, dijo que, si Bizkaia decidiera cambiar ahora este criterio y no renovar el convenio, habría que preguntarle «por qué» lo hace. No obstante, el diputado no espera que suceda así a tenor de las conversaciones que en su momento mantuvo con las correspondientes autoridades del territorio vecino.
Su homólogo vizcaíno, Josu Madariaga, solicitó recientemente a Alduntzin los datos de cómo van los planes en Gipuzkoa para tratar los residuos y, a partir de ahí, decidir. También señaló que Bizkaia no va a entrar a valorar la política de gestión de la Diputación de Gipuzkoa «por respeto institucional».
«Veremos, si quieren someter al juego político una cuestión meramente de servicio público», comentó Alduntzin, quien añadió que en ese caso Gipuzkoa adoptaría «las decisiones que correspondan», si bien insistió en que no espera que Bizkaia «no prorrogue ese convenio».
Alduntzin, también presidente de GHK, recalcó que el acuerdo no condiciona su vigencia a la construcción de una incineradora en Gipuzkoa, sino a que este territorio hiciera «una planificación y gestione sus residuos, que es a lo que está comprometido» el Gobierno de Bildu.
En este contexto, reveló que sería necesario que el convenio se prorrogara por lo menos un año, hasta que los resultados de la recogida puerta a puerta que se prevé implantar en 34 municipios guipuzcoanos, que se sumarán a los cuatro que ya lo hacen en la actualidad, hicieran posible no trasladar basura a Igorre, que recibe anualmente 25.000 toneladas.
Papel en blanco del PP
Desde que 34 municipios guipuzcoanos anunciaran el pasado jueves que implantarán el puerta a puerta, las críticas a la planificación de Bildu para con los residuos no se han hecho si no acrecentar. Borja Sémper, presidente del PP de Gipuzkoa, declaró ayer que la Diputación «no quiere resolver» el problema «serio» de los residuos.
El dirigente del PP reiteró su disposición a apoyar una moción de censura: «el PNV y el PSE tienen una hoja en blanco, y al final con la firma del PP, para rellenarla con proyectos para sacar adelante a Gipuzkoa», manifestó en una entrevista concedida a ETB y recogida por Europa Press.
Dijo lamentar que Bildu ostenta el «triste récord» de que «en poco más de 250 días de gobierno ha paralizado más de 40 proyectos estratégicos para Gipuzkoa», y apeló a la capacidad de responder a las «irresponsabilidades» de la coalición.
En cuanto a la posibilidad de extender la recogida puerta a puerta a Donostia, el diputado de Medio Ambiente se preguntó que «si es posible en otros municipios muchísimo mayores como Turín o Bruselas, por qué en San Sebastián no».
El PNV sostiene que el acuerdo que permite llevar a Bizkaia parte de los residuos de Gipuzkoa se cerró porque se «contemplaba expresamente la construcción» de una incineradora.