Las organizaciones ciudadanas de Aysén (sur de Chile) flexibilizaron ayer los bloqueos de carreteras, pero se mantiene la tensión con el Gobierno, que estudia sus peticiones, como subsidios a los precios de los combustibles o un salario mínimo más alto, entre otras.

Durante la madrugada del lunes, solo hubo algunos incidentes aislados en un sector de Coyhaique, la capital regional, según fuentes policiales, mientras se agudizan los problemas de abastecimiento de combustible y otros productos básicos.

Las protestas estallaron hace más de dos semanas, originadas por el aislamiento de la región, a más de 1.500 kilómetros al sur de Santiago, cuyos habitantes reclaman mejoras en la conexión con el resto del país, subsidios a los precios de los combustibles y un salario mínimo más alto, entre otros beneficios.

Dos años del terremoto

También tuvieron lugar protestas durante el fin de semana por la lentitud de la reconstrucción de las poblaciones afectadas por el terremoto y tsunami registrado el 27 de febrero de 2010, que causaron medio millar de muertos. Unas 300 personas marcharon vestidas de negro la comuna Constitución de la provincia de Talca, debido a la la «escasa reconstrucción» a dos años del terremoto. El senador Andrés Zaldívar afirmó que «Constitución fue una de las comunas más afectadas y la gente se da cuenta de que lo que está diciendo el Gobierno no es cierto». Según cifras del Gobierno, las obras de reconstrucción muestran un avance de un 68%, y en vivienda del 47%.

En la localidad de Dichato, en la región del Biobío, también se llevó a cabo una marcha en la que participaron unas 150 personas. El dirigente del campamento El Molino -la mayor aldea de damnificados en Chile-, Miguel Barra, denunció que «no hay una reconstrucción verdadera, sino una reconstrucción de cartón».