La Conferencia Oeste de la NBA está que echa humo cuando apenas faltan siete jornadas para finalizar la Liga regular. Los Thunder de Oklahoma City recuperaron el liderato en la noche del lunes gracias a su victoria ante los Bucks de Milwaukee y la derrota de los Spurs de San Antonio frente a los Utah Jazz.

Sin embargo, el logro de los Thunder parece ficticio, porque los Spurs jugaron el partido con sus tres estrellas -Duncan, Parker y Ginóbili- en el banquillo, desde donde vieron cómo sus compañeros frenaban una grandísima racha de 11 victorias consecutivas, la mejor de la Liga.

La clave de este duelo estuvo en los 25 puntos, incluidos 11 consecutivos en el decisivo cuarto período, de Devin Harris, que llegó como gran esperanza en la reconstrucción de los Jazz.

Otro base, Russel Westbrook, mantuvo su inspiración encestadora y, con 26 puntos, siete rebotes, tres asistencias y una recuperación de balón, ayudó en gran medida para que los Thunder venciesen a los Bucks de Milwaukee por 89-109. Asimismo, Kevin Durant aportó 19 puntos, repartió ocho pases de anotación y puso dos tapones.

Los hermanos Gasol

En el resto de partidos, Pau Gasol, con 25 puntos y nueve rebotes, suplió con creces la ausencia de Kobe Bryant -lesionado por una inflamación en la espinilla izquierda- para que Los Ángeles Lakers ganasen a los Hornets de Nueva Orleans por 91-93 y se mantengan terceros en la Conferencia Oeste.

En ello también ayudó la derrota de Los Ángeles Clippers ante los Grizzlies de Memphis (94-85). Aquí también fue clave Gasol -Marc-, con 18 puntos, incluidos 12 en la primera mitad.

Por su parte, el base esloveno Goran Dragic siguió en su línea de nuevo líder de los Rockets de Houston, y con 22 puntos, siete asistencias y tres recuperaciones, guió a su equipo hacia la victoria ante Portland (89-94).