La vista judicial por la demanda que ha interpuesto LAB contra la empresa Indusal por tutela de derechos fundamentales quedó ayer vista para sentencia. Mañana se conocerá, con toda probabilidad, el fallo.

La central sindical explicó al término de la vista judicial que espera que «la sentencia sirva para que de una vez por todas finalice el acoso sindical y la discriminación por razones de sexo que estas trabajadoras están sufriendo diariamente en la empresa» que se dedica a la lavandería.

En opinión de LAB estas situaciones «no se deberían producir» y, por eso, interpelan a las administraciones públicas «para que tomen cartas en el asunto y cesen las acciones de la empresa Indusal en contra de la libertad sindical».

Durante la vista judicial se constató, sobre todo, que los responsables de la lavandería de Arrigorriaga «no tienen argumentos convincentes de las razones por las que se han elegido para los traslados forzosos a trabajadoras y trabajadores adscritos a LAB», por lo que desde la Fiscalía se reconoció que esta actuación de Indusal «huele mal» y remarcó, como explicó una representante de las trabajadoras que siguió la vista judicial, que «se produce acoso sindical». Sobre todo, en un momento en el que en la empresa Indusal se tiene que renovar el convenio. Así, las trabajadoras a las que se quiere desplazar sin otro argumento que haber participado en la huelga de 45 días en 2008 en contra de la discriminación salarial y laboral por razón de sexo, rechazan ese cambio de ubicación porque les llevan a Andalucía, Valencia y Galicia.

A la vez que se celebraba el juicio, representantes de la central sindical se dirigieron a la Inspección de Trabajo para denunciar la situación que se está produciendo en Indusal. Asimismo, representantes del sindicato se reunirán esta mañana con responsables de la Delegación de Trabajo del Gobierno de Gasteiz para comunicar «estas agresiones que están padeciendo un día sí y otro también nuestras afiliadas y representantes en Indusal por el hecho de defender sus puestos de trabajo».

LAB, por otro lado, denunció la actitud del sindicato USO, «que ha llegado a ser la mano ejecutora de las prácticas de presión que ejerce Indusal contra sus trabajadoras y trabajadores». Por lo que ha hecho un llamamiento a este sindicato «que tiene representación mayoritaria en el comité de empresa», para que «deje de situarse al lado de la empresa y adopte una postura más cercana a las trabajadoras».

La central destaca que mientras a 23 trabajadoras y trabajadores se les quiere enviar a otras plantas «lo que supone un despido de facto», la empresa está comunicando a conocidas de las afectadas que les llamará para ocupar sus puestos de trabajo».