Fuentes del Departamento de Industria del Gobierno de Gasteiz confirmaron ayer que el Juzgado de lo Mercantil número 1 de la capital alavesa ha decretado la liquidación de la empresa dado que no generaba ingresos y tenía unos costes desorbitados. Así, será el Gobierno de Gasteiz y el Parque Tecnológico de Araba los que tendrán que hacer frente al agujero de entre 16 y 24 millones de euros generado por la empresa automovilística.

Este proyecto para impulsar el automovilismo de competición, liderado por Joan Villadelprat, recibió durante la pasada legislatura 50 millones de euros en ayudas institucionales y, además, el Parque Tecnológico de Araba se comprometió en 2009 a avalar el crédito que pidió Epsilon por la compra del edificio, por un valor de entre 16 y 24 millones de euros.

La crisis económica, su fracaso a la hora de entrar en la Fórmula 1 y la imposibilidad de encontrar un inversor hicieron que Epsilon entrara en situación concursal el pasado mes de setiembre al no poder afrontar los créditos contraídos con la Caja Vital y Kutxa, superiores a los 16 millones de euros.

Tras aquella suspensión de pagos y la solicitud de un expediente de regulación para toda su plantilla, ahora se ha iniciado la fase de liquidación, por lo que los tres socios del Parque Tecnológico de Araba -Lakua a través de la SPRI, con un 64%, la Diputación de Araba, con más de un 20% y el Ayuntamiento de Gasteiz, que tiene en torno a un 10%- deben afrontar las deudas.

Las tres instituciones implicadas en el Parque Tecnológico tendrán que negociar con las cajas el pago de esa deuda, aunque intentarán que «el perjuicio para las arcas públicas sea el menor posible».

Así lo señalan fuentes del Departamento de Industria, que recuerdan que las críticas vertidas por el consejero Bernabé Unda hacia el anterior Ejecutivo presidido por Juan José Ibarretxe (PNV), al asumir un «riesgo excesivo e injustificado», pese a que había informes jurídicos y económicos que desaconsejaban avalar los créditos.

La portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, reclamó el pasado mes a Epsilon que reintegrara los 3,3 millones de euros concedidos en 2007 como subvención no reintegrable en el marco del programa de ayudas para inversiones en proyectos estratégicos.