Este año es la primera ocasión que asisto a la celebración de este importante día internacional como Directora de la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo (EU-OSHA). Empecé al frente de la Agencia Europea a mediados de septiembre de 2011 y en este corto período de tiempo he clausurado la edición 2010-2011 de la campaña informativa «Trabajos Saludables sobre mantenimiento seguro» y he iniciado, la semana pasada, la edición 2012-2013, bajo el título «Trabajando juntos para la prevención de riesgos».

En realidad el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, que celebramos el 28 de abril, ha sido siempre la ocasión perfecta para promover la acción conjunta de empresarios, trabajadores y administraciones por la mejora de las condiciones de trabajo, no sólo en Europa, sino en todo el mundo.

La prevención de los riesgos laborales, que es responsabilidad última del empleador, como establece la ley, no puede, sin embargo hacerse realidad y alcanzar su máxima eficacia, si no es con el compromiso de todas las partes implicadas. Nuestra campaña anima al liderazgo de los gestores y directivos de las empresas con la consulta y participación de los trabajadores y sus representantes.

Pero, en este 28 de abril, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que es quien lidera la celebración del Día Mundial, nos anima específicamente a «pensar en verde» y pone la atención en la promoción de la seguridad y la salud laboral en una economía ecológica.

El medio ambiente mundial saldrá beneficiado de la creciente prioridad que se otorga a la tarea de encontrar nuevas fuentes de energía y otras actividades de protección ambiental, como el reciclaje o la mejora de los sistemas de eliminación de residuos. Lamentablemente, sin una actuación apropiada, esta tendencia puede desarrollarse a costa de las vidas y la salud de los trabajadores. Por este motivo, los puestos de trabajo «verdes» constituyen el tema del Día mundial de la seguridad y la salud en el trabajo 2012, con la intención de promover la seguridad y la salud en una economía ecológica.

Los «empleos verdes» pueden consistir desde la realización de actividades en centros de producción de energía no generadora de emisiones de carbono, hasta la fabricación e instalación de paneles solares, el reciclaje de residuos, o el trabajo en áreas contaminadas.

Los trabajadores de estos empleos pueden verse expuestos a diversos riesgos, que van desde los tradicionales, como las caídas, por ejemplo durante la instalación de turbinas eólicas, hasta otros más nuevos, como la exposición a materiales novedosos en el entorno de trabajo. Existen riesgos físicos, biológicos, químicos y psicosociales, y dado que algunos ámbitos laborales son muy recientes, no todas las empresas pueden disponer de los sistemas adecuados de gestión de la seguridad y la salud laboral.

La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo está desarrollando, precisamente, un proyecto plurianual sobre puestos de trabajo verdes.

La anticipación de riesgos nuevos y emergentes constituye una tarea fundamental de la Agencia Europea que, en consulta con sus interlocutores sociales, ha empezado a elaborar una serie de escenarios con el fin de examinar el modo en que se desarrollará la actividad en el terreno del empleo verde hasta el año 2020, así como los retos que planteará en el ámbito de la seguridad y la salud en el trabajo en estos próximos años.

En el proyecto se revisan las tecnologías ecológicas en los sectores de la construcción, el transporte, la manufactura, el tratamiento de residuos y la energía eólica; la bioenergía y la biotecnología; etc.

Hemos publicado de momento dos informes sobre los empleos verdes, con el fin de ilustrar la manera en que las metodologías de previsión pueden aplicarse a las labores de formulación y toma de decisiones en el ámbito de la seguridad y la salud ocupacional. Paralelamente, emprenderemos tareas de seguimiento encaminadas a examinar con mayor exhaustividad los puestos de trabajo, sectores, grupos de trabajadores y tecnologías de elevado riesgo y particular relevancia que hayan aparecido como destacados en estos escenarios.

El Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo se celebra, desde hace años, para promover la prevención de los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales a escala mundial. Se trata de una campaña de sensibilización concebida para centrar la atención internacional en las tendencias emergentes en el campo de la seguridad y la salud en el trabajo, así como en la magnitud de las lesiones, las enfermedades y los fallecimientos relacionados con la actividad laboral en todas las regiones.

En este 28 de abril, defendemos que la aportación de la seguridad y salud laboral es también crucial en el debate del crecimiento sostenible. Es nuestra labor asegurar que los «empleos verdes», que aumentarán en el futuro, sean también empleos seguros y sanos. Apoyamos la promoción de la seguridad y la salud laboral en una economía verde, para lograr un desarrollo económico y social que sea también ambientalmente sostenible.

Les invito a visitar la página web de la OIT para consultar la información sobre este Día Mundial, así como la página web de la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo para más información sobre nuestro proyecto sobre empleos verdes podéis consultar en nuestra página «http://osha.europa.eu».