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CRíTICA: «Infiltrados en clase»

El peterpanismo yanqui no conoce límites

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Mikel INSAUSTI

Te ríes bastante con «Infiltrados en clase», pero es mejor no pensar en lo que estás viendo. Para disfrutar de esta comedia idiota hay que apagar la actividad cerebral durante algo de más de hora y media, aunque es díficil evitar que nuestra mente no se rebele ante semejante caudal de ataques a la inteligencia humana. Siendo sincero, he de confesar que me lo pasé bien durante la primera parte, que no deja de ser una divertida parodia de las comedias estudiantiles de lo años 80 patentadas por John Hughes. Pero la segunda se me hizo muy cuesta arriba, debido a que en ella la película toma el rumbo de una comedia de acción policial de lo más chusca, con sobredosis de bromas machistas de mal gusto y chistes de violencia fascistoide, homófoba y demás.

Jonah Hill es uno de los actores con más talento de su generación, salvo porque parece empeñado en desperdiciar ese don en proyectos que no están a su altura. Digo esto, porque todavía nos queda por ver esta temporada «El canguro», que miedito me da. Si sigue así no tendré más remedio que borrarme de su club de fans, en el que me inscribí tras verle en «Cyrus» o «Moneyball». Creo que está empezando a dejar al descubierto su punto débil, porque el amigo Jonah es un poco vaguete y se apunta a rodajes cómodos donde no tiene más que tirar de repertorio, gracias a que el papel de prototípico joven yanqui aquejado de peterpanismo se lo sabe de memoria y lo puede hacer con el piloto automático puesto.

En «Infiltrados en clase» lo aplica a una revisión de la teleserie de finales de los 80 «Jóvenes policías», lo que le permite formar pareja cómica y antitética con Channing Tatum, que se autoparodia para la ocasión. Jonah es el listillo y Chaning el musculitos, así que creen formar un equipo perfecto, el cual amenaza con reincidir en la obligada secuela de turno. Después de volver al instituto, preparan ya nueva entrega en la universidad. De momento, ya han gastado el comodín del artista invitado, pues no falta el esperado cameo de Johnny Depp, quien para algo se dio a conocer en aquel programa televisivo originalmente titulado «21 Jump Street».

 

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