La Diputación vizcaina ha redactado un proyecto para el desdoblamiento del alto de Santo Domingo, uno de los puntos negros de los accesos a Bilbo, pero se ejecutará «cuando sea oportuno», según manifestó ayer la titular de Obras Públicas y Transportes. Itziar Garamendi aseguró que no cree que esa actuación vaya a contribuir a disminuir los accidentes.

El coste estimado de los trabajos sería de 31 millones de euros y un plazo de ejecución de 24 meses. «Se hará cuando se pueda», insistió Garamendi, que achacó los numerosos siniestros de tráfico al exceso de velocidad de los vehículos. Por ello, se instalarán radares en los tramos Otxarkoaga-Ibarsusi y Derio-Galbarriatu.

En la misma Cámara vizcaina se aprobó, por unanimidad, instar a la Diputación a que adecue el firme del corredor del Txorierri. Garamendi avanzó que en junio tendrán un informe sobre el estado del vial y estudiarán los pasos a dar.