Cuando falta una semana para la repetición de las elecciones legislativas en Grecia, tanto Evangelos Venizelos, el líder del socialdemócrata Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok), como Antonis Samaras, el de la conservadora Nueva Democracia (ND), pidieron la conformación de un Gobierno de concertación para evitar el caos político desatado por la imposibilidad de formar un Gabinete tras los comicios del pasado 6 de mayo.

Las encuestas sitúan como posible vencedora, empatada en primer lugar con ND a la alianza de izquierda Syriza, que ha prometido, en caso de victoria, abolirá el memorándum de austeridad pactado por el anterior Ejecutivo con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) porque «es el piloto hacia la catástrofe» que asola Grecia. La eventual victoria de Syriza ha llevado a las potencias europeas a presionar a Grecia y sus rivales Pasok y ND a agitar el fantasma del caos y advertir de la posible salida del país del euro.

Ayer de nuevo, Venizelos y Samaras urgieron a formar un Gobierno de unidad nacional ante la posibilidad de que el escenario postelectoral de mayo vuelva a repetirse ya que ninguno de los partidos podrá gobernar en solitario.

«No parece que nada lleve a una solución. Nos dirigimos a la ausencia de Gobierno», declaró el líder del Pasok.

«Está claro que los ciudadanos griegos quieren un Gobierno el 18 de junio. Un Gobierno que trabaje para la permanencia del país en la eurozona», subrayó antes de criticar a Syriza y a ND, a los que responsabilizó de bloquear la situación política debido a su falta de acuerdo pese a que ambos dicen apostar por seguir dentro de la Eurozona. «Es obvio que, a pesar de la voluntad de la mayoría de los ciudadanos, existe el riesgo de que el 18 de junio la situación permanezca bloqueada por la actitud irresponsable de Syriza y de Nueva Democracia», afirmó ayer en rueda de prensa.

El líder del Pasok se ha puesto en contacto por escrito con ND y Syriza para alcanzar un acuerdo de emergencia. En su carta indica que «el país no puede gobernarse si más de la mitad de los griegos se oponen al Gobierno».

Mientras, en una entrevista Antonis Samaras estimó necesario crear un Gobierno «sea como sea», porque un nuevo resultado electoral inconcluso, que llevaría a la convocatoria de nuevas elecciones, sería, en su opinión, poco menos que «suicida».