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Txentxo Jiménez emplaza a Geroa Bai a abandonar la coalición NaBai

Txentxo Jiménez, parlamentario de NaBai, manifestó ayer que el abandono premeditado de la definición de izquierdas por parte de Geroa Bai supone una ruptura con los principios de la coalición. Por ello, insta a «dar los pasos necesarios para actuar por separado» tanto en el grupo parlamentario como en los ayuntamientos. Jiménez ve incapaz a PNV de comprometerse en una lucha firme contra los recortes.

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Aritz INTXUSTA |

Txentxo Jiménez considera que las bases organizativas de Geroa Bai han dejado a las claras que PNV y Zabaltzen no se sienten cómodos bajo la definición de izquierdas y que evidencian un giro hacia «el centro derecha». Este paso los distanciaría de los postulados de la coalición NaBai 2011 hasta tal punto que Jiménez cree que es el momento de que cada uno trabaje por separado. Para Jiménez, el posicionamiento izquierdista de Nafarroa Bai se deriva de la presencia de Aralar y, por tanto, la ausencia de Aralar en Geroa Bai ha propiciado que el PNV «haya determinado el modelo social» de la nueva formación.

El ex coordinador general de Aralar en Nafarroa insta a que se «den los pasos necesarios» para que Geroa Bai abandone la coalición NaBai, ya que sus miembros han renunciado a una de sus «señas de identidad», como es la apuesta nítida por la izquierda.

Jiménez apunta también que el valor de las ideas es crucial en esta época de ataques del neoliberalismo y considera que el PNV es incapaz de enfrentarse con determinación a los recortes sociales que están impulsando PP y UPN. «NaBai debe estar presente y activa, convocando e impulsando la respuesta. ¿Es posible que el PNV mantenga una posición activa en esta línea?», se pregunta el parlamentario, que manifiesta también sus dudas sobre si los jeltzales pueden «ir de cara contra los bancos, los malos empresarios, esta Europa, o pararle los pies al sistema».

En buena medida, la reacción de Jiménez -que fue remitida a los medios con el membrete de Aralar- se debe a la presentación pública de las bases de Geroa Bai, donde el término izquierda pasa de tener un papel preponderante a otro bastante secundario. Estas bases, como hizo público ayer GARA, fueron redactadas en un 99% por el PNV, ya que son prácticamente exactas a la propuesta definitiva que realizó el 5 de mayo.

La asociación Zabaltzen, que comparte el poder al 50% con el PNV, apenas introdujo cambios, salvo la eliminación del término «abertzale» del texto final, expresión que se ha sustituido por «nacionalismo cívico, incluyente y democrático». Las bases contienen un anexo en el que se aboga por eliminar «soluciones ideológicas enlatadas» y donde se apuesta por «abandonar progresivamente el arsenal conceptual envejecido».

Disensiones en temas clave

Las bases pueden ser el detonante, pero el ambiente se había enrarecido tiempo antes, sobre todo en el seno del grupo parlamentario. Así, Jiménez repasa una serie de temas de calado en los que los dos miembros de Geroa Bai que están ahora en el grupo parlamentario de NaBai han votado de forma diferente. Enumeró la postura favorable de Patxi Leuza (Zabaltzen) y Manu Ayerdi (PNV) a proyectos como las canteras de Zilbeti, la incineradora de Olatzagutia, la destrucción de las huertas de Arantzadi, la «autopista eléctrica» y, lo más polémico de todo, su apoyo al TAV.

Además, el parlamentario asegura que han roto la disciplina de voto incluso en iniciativas que habían surgido desde dentro de la propia Nafarroa Bai. «Resultan evidentes las diferencias de programa que existen entre nosotros y que están saliendo poco a poco o se mantienen de forma soterrada para sostener la cohesión del grupo», comenta Jiménez.

En este punto, el parlamentario de Aralar recuerda que el PNV encargó «un informe jurídico para analizar la posibilidad de abandonar el grupo parlamentario de NaBai», en referencia a una información publicada por GARA. Ese informe estudiaba los derechos de los parlamentarios no adscritos.

La fractura entre los socios, una división difícil de medir

La crisis que se abre dentro de NaBai no conlleva la desaparición de las siglas, según parece, aunque sí será traumática. No están muy claros los bandos, pero sí los actores. Por un lado está Aralar, que tiene cuatro de los siete parlamentarios de la coalición y será quien mantenga la denominación NaBai en la Cámara foral. En la otra parte están el PNV y la Asociación Zabaltzen, que se creó el verano pasado a partir de un grupo de simpatizantes de NaBai.

La integración de Aralar en Amaiur demostró que la formación de Patxi Zabaleta no era un compartimento estanco. Su apuesta en asamblea por la acumulación de fuerzas provocó varias bajas. La más relevante en Nafarroa ha sido la de Itziar Gómez, edil de Iruñea. Se desconoce, por tanto, si una eventual división, como pide Jiménez, generará nuevas dimisiones.

Pero tampoco está claro que Zabaltzen pueda erigirse como la organización que aúna a todos los independientes. Por ejemplo, el parlamentario Juan Carlos Longás no pertenece a Zabaltzen y no se le considera cercano al PNV. Además, el poco peso que tendrán los independientes en el esquema de Geroa Bai puede generar oposición.

Una eventual división también afectará a los ayuntamientos, como el de Iruñea. Aun así, quizá los consistorios pequeños sepan blindarse a las decisiones que se han tomado desde arriba. De todas formas, el tiempo va a ser un elemento clave. Independientemente de cuándo se dé la ruptura, los plazos electorales son largos y los militantes y simpatizantes tendrán tiempo para elegir entre sumar fuerzas o Geroa Bai. A.I.

figura de peso

Txentxo Jiménez no es portavoz parlamentario de Nafarroa Bai porque finalmente tiene un puesto en la Mesa. También ha dejado de ser coordinador general de Aralar en Nafarroa. Pero sigue siendo una figura clave.

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