Udate
Jóvenes excursionistas, en «El secreto de los 24 escalones»
M.I. | DONOSTIA
Aunque a Santiago Lapeira últimamente le ha dado por hacer películas para adolescentes no es ningún recién llegado, después de que hayan pasado casi treinta años desde su debut con «Asalto al Banco Central». Fue, sin embargo, hace tres años cuando realizó «ESO (Entidad Sobrenatural Oculta)», acerca de los alumnos de un viejo instituto que descubren conexiones paranormales con el pasado del centro. Pese a las pésimas críticas cosechadas, ha decidido continuar por ese camino con «El secreto de los 24 escalones», realización un poco más escorada hacia la aventura fantástica, pero con idéntica conexión entre estudiantes y esoterismo.
La sinopsis sitúa al cuarteto protagonista en la edad de 17 años, lo que obliga a Maxi Iglesias, que ya cumplió los 21, a permanecer encadenado a la imagen escolar del eterno repetidor. Durante una excursión por los Pirineos conocerán, por medio de una amigo que estudia a los Cátaros, una leyenda medieval en torno a la Medalla del Pescador, enterrada en un cementerio templario. Lo que empieza siendo un juego se complica con la presencia de ladrones de arte y de los espíritus de los caballeros cruzados.