UDATE
El humor nórdico se abre al mundo en «Siempre feliz»
La ópera prima de la realizadora noruega Anne Sewitsky triunfó el pasado año en Sundance, además de recibir el Giraldillo de Oro a la Mejor Película en el Festival de Sevilla. Por primera vez una comedia nórdica rompe las barreras culturales y hacer reír a gente de todas partes.
Mikel INSAUSTI | DONOSTIA
La debutante Anna Sewitsky quería hacer un primer largometraje siguiendo las normas del movimiento Dogma, pero durante el rodaje iba traicionándolas hasta completar una divertida comedia. Descubierta en la pasada edición de Sundance, suscitó el interés de distintas productoras de Hollywood, y una de ellas se ha hecho con los derechos para el consabido e inevitable remake en inglés. Algo absurdo, se mire por donde se mire, porque la gracia de «Skyt lykkelig» reside, precisamente, en las apreciables diferencias culturales del humor nórdico.
Según Anne Sewitsky, en Noruega se toman a broma las cosas más dramáticas, incluso aquellas que en otras partes no harían ninguna gracia. Y, desde luego, el argumento de su ópera prima podría ser a grandes rasgos el de cualquier drama existencial de Bergman sobre las relaciones de pareja, con sus tensiones e infidelidades. Y, es más, la joven cineasta noruega hasta se atreve a introducir un coro de tragedia griega, con la originalidad de que cantan espirituales negros, punteando el relato a modo de extraños narradores.
La pareja anfitriona vive en el medio rural y tiene un hijo biológico, pero llevan un año sin contacto sexual. Ella necesita hacer nuevas amistades desesperadamente, así que alquilan la casa contigua a una pareja de urbanitas que proceden de Dinamarca, los cuales llegan acompañados de un hijo adoptivo de origen africano, al que el vecino nativo pronto convertirá en esclavo de sus juegos. Los intercambios entre los adultos no resultarán menos accidentados, incluso más allá de la heterosexualidad, probando nuevas experiencias. En medio del lío la protagonista sabrá extraer lo que realmente conviene a su felicidad personal.