OLIMPIQUE LYONNAIS 1

REAL SOCIEDAD 1

La pretemporada elevó ayer uno o dos niveles de exigencia con un enfrentamiento ante un rival de entidad como el Olympique Lyonnais bastante más rodado -prepara un partido de Supercopa la próxima semana- y la Real respondió con cierta solvencia a esta vuelta de tuerca que le propinó el equipo de Garde Remi. Sin realizar un partido demasiado brillante, los de Montanier pudieron incluso haber sumado una victoria más tras adelantarse gracias al gol de Griezmann, pero un fallo defensivo permitió empatar al equipo francés a un cuarto de hora del final de partido.

Tratándose de un rival de entidad, Philippe Montanier alineó de inicio un equipo que puede asemejarse mucho al que puede enfrentarse al Barcelona en el arranque liguero, con las limitaciones de las ausencias de Claudio Bravo, Iñigo Martínez y Carlos Vela. El técnico normando dio las primeras pistas y sobre todo destacó la posición de Antoine Griezmann, que jugó por dentro, en la posición que habitualmente ocupa Zurutuza, sin llegar a tener demasiado protagonismo pero volviendo a ver puerta llegando de atrás.

Recién llegado de la concentración olímpica, Asier Illarramendi también jugó de inicio, dejando grandes destellos de calidad, con Elustondo haciendo de ancla por detrás de estos dos centrocampistas más ofensivos, con Xabi Prieto y Chory Castro por las bandas e Imanol Agirretxe en punta de ataque.

Con altibajos

Pese a poner uno de los mejores onces posibles, los guipuzcoanos, que ayer estrenaron la elástica naranja, sufrieron de inicio ante un rival con más chispa, aunque poco a poco fueron tomándoles la medida. En una pérdida similar a la que luego daría origen al gol del Olympique, Lisandro, el más activo junto a Pied, dio el primer susto importante, con un lanzamiento lejano que dio en el palo.

A medida que se fue haciendo con la posesión, la Real fue creciendo y tuteó al rival, creando peligro incluso en alguna jugada a balón parado.

En el descanso, el técnico francés cambió a la práctica totalidad de sus jugadores, circunstancia que fue aprovechada por la Real para presionar algo más arriba y hacerse dueña del partido tras la reanudación.

Ahí llegaron los mejores minutos de los realistas, que dispusieron de buenas oportunidades. Griezmann, que pocos minutos antes había marrado un mano a mano ante el portero por gustarse un poco en exceso, fue el autor del gol que permitió adelantarse a su equipo, tras aprovechar un servicio de Chory Castro desde la izquierda.

Montanier inicio su carrusel de cambios a partir de ese instante y estas variaciones desdibujaron a su equipo. El Olympique lo aprovechó para venirse arriba y empató en una contra en la que Mikel González perdió un balón al incorporarse al ataque y Briand no desaprovechó el hueco dejado en un rechace.