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Liga San Miguel

Empate en el liderato tras el triunfo de Kaiku en San Juan

Tirán sorprendió al colarse en segunda plaza y, de paso, sacar a Pasai Donibane de la tanda de honor. Hondarribia salvó los muebles superando por centésimas a Urdaibai. Portugalete sigue en ascenso.

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Arnaitz GORRITI

Después de llevarse el Campeonato de Bizkaia, Kaiku parece estar en forma. Ayer dio buena cuenta de todos sus rivales en la III Bandera Iberdrola disputada en Pasai Donibane.

La «Bizkaitarra» aventajó en más de 12 segundos a la sorprendente Tirán, que acabó segunda, y logró empatar en la cabeza de la clasificación general de la Liga San Miguel, aunque Hondarribia, que salvó los muebles tras superar por centésimas a Urdaibai -entre el segundo y el cuarto lugar solo hubo 58 centésimas de diferencia- y mantiene el liderato por mejor cómputo de puestos, ya que ambas traineras también empatan a victorias, cuatro para cada una.

Los pupilos de José Luis Korta dominaron la regata desde el primer largo. Tuvieron en Urdaibai y Tirán dos rivales más que correosos en los dos primeros largos. A partir de la segunda ciaboga, la «Bou Bizkaia» no pudo sostener el ritmo y acabaría en cuarta posición después de un final de infarto, mientras que la embarcación galaica, presente en la segunda tanda -por mucho que la regata se disputara contra el cronómetro, con un minuto de diferencia entre los contendientes-, solo pudo contemplar el gran final de Kaiku, que pulverizó todos los registros en el largo definitivo.

Sin embargo, los miembros de Tirán pudieron llevarse un muy buen sabor de boca de la regata de Pasai Donibane. Precisamente a costa del bote local, la trainera gallega consiguió colarse en la tanda de honor, después de que Pasai Donibane cayera hasta la quinta plaza. Y gracias, ya que la «Libia» de San Pedro se quedó a menos de dos segundos de superar a su eterno rival.

Sufriendo entre las olas

La desembocadura de la ría dejó la opción para que los patrones dieran muestras de su pericia. El viento y las olas dificultaban a los remeros avanzar en los últimos metros de los largos de ida. Así las cosas, los botes decidieron guarecerse del exceso de agua a base de palcas. No fue, pues, para nada, una regata de pura fuerza, y sí muy incómoda, que acabaría por desgastar sobremanera a los remeros y a los patrones, que debieron hacer verdaderos escorzos, agachados y encorvados, para ofrecer una menor resistencia al aire.

En esas condiciones, los botes cántabros lo pasaron muy mal. Pedreña, que tuvo que bogar con la trainera suplente de Kaiku, ya que se les estropeó la proa en los campeonatos cántabros, acabaría penúltima, con Zierbena -que a pesar de ocupar la última plaza, no dio mala impresión- pisándole los talones. Castro y Astillero, por su parte, sufrieron y rindieron muy por debajo de lo esperado.

Por contra, embarcaciones como la de Portugalete, que sigue en una clara trayectoria ascendente, se amoldaron de maravilla a las condiciones del agua. La «Jarrillera» logró un muy meritorio séptimo lugar, a escasos dos segundos de San Pedro y a cuatro de San Juan, y asciende ya a la novena plaza, situándose a un solo punto de Astillero -39 para Portugalete, 40 para Astillero-, embarcación que marca el límite de la segunda tanda.

El desempate, en Getxo

La Liga San Miguel celebrará en Getxo este mediodía su décima prueba. Concretamente, se trata de la regata Getxoko Estropaden XXXIV. Ikurriña, un duelo con cuatro calles y tres ciabogas, tras el que se llevará a cabo el desempate entre las traineras de Hondarribia y Kaiku.

Después de esta regata, la Liga San Miguel se tomará un respiro hasta el 11 de agosto, la XXV Bandera Mapfre de Hondarribia.

 
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