El sector ferroviario sale a la calle en contra de su privatización
Los trabajadores de Renfe, Feve y Adif hicieron huelga durante la jornada de ayer en rechazo a los planes del Gobierno español de liberalizar y privatizar el sector ferroviario. Los sindicatos convocantes se manifestaron en Bilbo, donde destacaron el alto seguimiento que la huelga tuvo en la CAV. LAB se concentró asimismo frente a la sede de Lakua en la capital vizcaina para reivindicar la transferencia de competencias del sector ferroviario a Hego Euskal Herria.
GARA | BILBO
Las estaciones de Renfe, Adif y Feve permanecieron ayer sin apenas actividad debido a la jornada de huelga convocada por los sindicatos LAB, UGT, CCOO, CGT, Semaf y Sindicato Ferroviario en contra de la decisión del Ejecutivo español de liberalizar el sector ferroviario. Los convocantes se mostraron satisfechos con el seguimiento, que calificaron como amplio. Asimismo, señalaron que las protestas transcurrieron sin incidentes y que se cumplieron los servicios mínimos establecidos.
Entre las protestas convocadas durante todo el día, LAB se concentró ante la sede del Gobierno de Lakua en Bilbo con la intención de emplazar al Ejecutivo de López que tome las riendas del conflicto y reivindique la transferencia de competencias del sector ferroviario a Hego Euskal Herria, llamamiento que hicieron también al Gobierno navarro, presidido por Yolanda Barcina.
Bajo el lema «Por un sector ferroviario público vasco. Euskal Herrian lan eta erabaki», reivindicaron una red pública que tenga Euskal Herria como eje y responda a las necesidades de los ciudadanos y los trabajadores. El miembro de la sección de LAB en Renfe Patxi Aguayo consideró que «hoy más que nunca se hace necesario dotarnos de mecanismos y competencias plenas en materia socioeconómica con capacidad de decisión» reivindicó dichas herramientas para poder decir sobre el tipo de infraestructuras, servicios públicos y modelo de relaciones laborales.
En esta línea, situó la transferencia de competencias en materia de transporte como paso fundamental a dar. Además, alertó de que la privatización del ferrocarril podría traer consigo «una reducción de personal, de la calidad del servicio y un encarecimiento del precio del billete».
Una vez finalizada la concentración frente a la sede de Lakua, LAB se sumó a la manifestación convocada por el resto de sindicatos, que recorrió las calles de Bilbo bajo el lema «Por un ferrocarril público y social. No a la privatización». Los manifestantes rechazaron los planes de Rajoy, que incluyen la liberalización del transporte de pasajeros, la integración de Feve en Adif y Renfe y la división de esta última empresa en cuatro sociedades.
Servicios mínimos «abusivos»
Según lo establecido en Renfe, en cercanías circuló el 60% de los trenes en hora punta y el 40% en los períodos de menor afluencia. En media distancia, funcionó el 67% de las unidades. LAB consideró los servicios públicos establecidos «un abuso» y censuró que fue un intento de neutralizar las protestas. CCOO señaló que «la imposición de los servicios mínimos» constituye «una agresión». Ambos sindicatos adelantaron su intención de recurrirlos.
LAB adelantó ayer que seguramente convocará otra jornada de huelga contra la privatización del sector ferroviario para el próximo día 17 de setiembre, al igual que hicieron la pasada semana el resto de sindicatos.
En el resto del Estado español, los sindicatos destacaron el «alto seguimiento» de la huelga convocada contra el proceso de la liberalización aprobado por el Gobierno, al que acusaron de imponer unos servicios mínimos «abusivos y desconocidos» y de «desplegar un ejército de policía anti-disturbio» a pesar de la actitud correcta y la responsabilidad de los trabajadores.
«Prácticamente la totalidad de trabajadores y trabajadoras con opción a hacer la huelga han secundado el paro contra la liberalización y privatización de Renfe, Adif y Feve», señalaron en un comunicado conjunto CCOO, UGT, CGT, SCF, Semaf, Confederación Intersindical y TCM. Sobre el seguimiento se dio el habitual baile de cifras entre convocantes y fuentes del Gobierno. Según CCOO, cerca de un 90% de los trabajadores con posibilidad de hacer la huelga decidieron secundarla en el turno de noche y en las primeras horas del turno de mañana, el Ministerio de Fomento, por su parte, cifró el seguimiento del paro en un 20%.
Los portavoces de los sindicatos convocantes denunciaron la falta de disposición del Gobierno para dialogar y reafirmaron su deseo de no detenerse hasta que «el ferrocarril público, de toda la ciudadanía, esté a salvo de quienes quieren rapiñarlo a costa del esfuerzo y los impuestos de dicha ciudadanía». GARA