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Atletismo | Finales del día

Más vale bueno conocido...

Yelena Isinbayeva, reconciliada con su entrenador de toda la vida, aspira a convertirse en la primera mujer que logra tres oros olímpicos consecutivos, en una final en la que no estará su rival más cualificada, la brasileña Fablaba Mure, eliminada en la fase de clasificación.

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Jon ORMAZABAL

...Que mejor por conocer. Con el necesario matiz, la final de pértiga de esta tarde en el Estadio Olímpico de Londres es una de esas ocasiones en la que la sabiduría del refranero popular sirve como mejor exponente de la realidad. Y es que Yelena Isinbayeva y Fablaba Mure, las dos atletas predestinadas a ofrecer un magnífico enfrentamiento en la final de pértiga, son las dos caras de una misma moneda, la de modificar sus pautas habituales antes de un evento de la máxima exigencia.

La rusa Yelena Isinbayeva vuelve a ser la «zarina de la pértiga», vuelve a tener sed de medallas y récord mundial en los Juegos Olímpicos de Londres, donde a pesar de su irregularidad de los últimos años, espera reencontrarse con su mejor nivel. Además, la victoria la encumbraría a la categoría de historia del atletismo, ya que se convertiría en la primera mujer en encadenar tres oros consecutivos, tras los obtenidos en Atenas 2004 y Beijing 2008.

Su medalla de oro en el Mundial indoor de Estambul 2012, en marzo, ha permitido que gane optimismo tras unos años (2009-2011) marcados por una sucesión de fracasos inhabituales en ella, la única que ha logrado superar los cinco metros.

Reconciliada con el entrenador de su infancia, Yevgeny Trofimov, Isinbayeva ha vuelto a su mejor forma, como en 2008, cuando era prácticamente invencible. «Puedo decir que he recuperado esa magnífica sensación de pasar por encima de la barra», señaló recientemente.

Tras acostumbrarse a encadenar éxito con éxito, Isinbayeva vivió grandes decepciones en los últimos tres años: fue 11ª en el Mundial de Berlín-2009, 4ª en 2010 en el Mundial en sala de Doha y 6ª en el de Daegu.

Isinbayeva se separó de su entrenador Trofimov en 2005 y eligió a Vitaly Petrov, el preparador del legendario pertiguista ucraniano Sergei Bubka. Ahora considera que esa decisión ha sido la culpable de gran parte de sus fiascos. En 2011 se reconcilió con Trofimov y cree que la tendencia ha cambiado. «Cometí un error al romper con Yevgeny, pero afortunadamente lo he corregido y ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida. Es mi entrenador, mi amigo y puede que mi segundo padre».

Por si fuera poco, su camino hacia el oro se allanó el sábado cuando Fablaba Mure, campeona mundial de la especialidad, quedó sorpresivamente eliminada al no conseguir la marca mínima de 4,55 metros. La brasileña llegó a Londres entre las favoritas, pero culpó del fiasco a un cambio en su rutina de trabajo. «Cometí un gran error al cambiar mi método de entrenamiento. Sé que tengo el talento y que Isinbayeva es la única saltadora mejor que yo. Modifiqué la pauta de mis prácticas solo para ganarla, y ha sido un tremendo error», añadió.

400 metros

En cuanto a las carreras, la atención estará centrada hoy en categoría masculina en las dos de 400, tanto en vallas, donde se espera un bonito duelo entre el puertorriqueño Javier Cuison y el veterano dominicano Félix Sánchez -mejor marca del año en las series de clasificación-, como lisos. En chicas, se pondrá en liza el título de los 3.000 metros obstáculos, donde la etíope Hiwot Ayale llega con el mejor tiempo de las series. También se disputará el peso femenino.

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