Los rojillos siguen invictos
Holanda confirma la buena dinámica de la pretemporada
La escuadra navarra está viendo puerta con facilidad -Nino es su estilete- y los nuevos se están acoplando.
Natxo MATXIN
Habrá que tocar madera. Todo está transcurriendo a pedir de boca en la pretemporada rojilla, cumpliendo la planificación diseñada, obteniendo buenos resultados y esquivando las lesiones, aspecto este último en el que la escuadra navarra no estaba teniendo suerte en anteriores fases de preparación. La concentración holandesa recién finalizada ha servido para confirmar esa tendencia.
La expedición osasunista regresó ayer por la tarde a Iruñea con la sensación del deber cumplido y de que su proceso de puesta a punto de cara al comienzo liguero, cuando apenas faltan dos semanas, va por buen camino. Es la sensación que, de momento, se ha establecido en el entorno rojillo, un tanto preocupado por la marcha de pesos pesados en el presente mercado veraniego.
Aun siendo cierto que los rivales contra los que se ha medido Osasuna hasta el momento no son de una entidad contrastada, no lo es menos el hecho de que mantener la condición de invicto ayuda a creer en los automatismos ensayados y en la idea futbolística que pretende aplicar José Luis Mendilibar. El equipo está sabiendo incorporar a su once a los nuevos fichajes, la mayor competencia en algunos puestos está provocando una mejora en el rendimiento -Cejudo y Lamah, por ejemplo- y la precisión de cara a la meta contraria animan a pensar en un bloque competitivo y con mucho futuro.
Nino y variantes defensivas
En el último apartado no se puede dejar de destacar las actuaciones individuales de Nino. El delantero almeriense está dispuesto a sacarse la espina de la temporada pasada, en la que él mismo quedó muy desencantado con su escaso acierto anotador. Los cinco goles que lleva cosechados hasta el momento dan buena fe de que su fichaje no estaba muy desencaminado respecto al objetivo que se perseguía: que fuese el hombre materializador del equipo rojillo. Lo importante es que la vena del ariete andaluz siga intacta una vez se inicie la competición.
En cualquier caso, los encuentros amistosos disputados en Holanda también han dejado claro que hay camino por recorrer. Mendilibar quiere que sus pupilos sepan defender con dos dibujos diferentes -dos o tres centrales-, aspecto en el que está incidiendo con especial insistencia, y la escuadra navarra ha dejado entrever que todavía le falta un punto para conseguir el idóneo tono físico.
Tras el descanso del que disfrutará hoy, la plantilla osasunista volverá a trabajar mañana en sesión vespertina -Tajonar, 18.00-, con la vista puesta en continuar con su preparación y el próximo compromiso amistoso.
Será ante el Zaragoza el miércoles, en un encuentro que se celebrará a las 19.00 en el campo tafallés de San Francisco, un acto que se está convirtiendo en tradicional, en esta ocasión poco antes de las fiestas de la localidad navarra. Un partido que medirá con mayor precisión la actual condición física y técnica de los dirigidos por Mendilibar, ya que se trata de un rival directo de cara a la próxima campaña en la lucha por la permanencia.
Los deberes de la escuadra navarra tendrán su continuidad el viernes cuando la expedición rojilla se desplace hasta Cádiz para tomar parte en el Trofeo Carranza. Ese mismo día, a las 19.00, jugarán contra el conjunto luso del Nacional de Madeira en la primera semifinal del torneo. En el caso de que los rojillos pasen a la final, jugarán el sábado a las 22.00; si lo hacen en la de consolación, será a las 19.00. N.M.
A Mendilibar le falta una pieza para completar la plantilla que quiere. Un pivote defensivo que supla con garantías la marcha de Javad Nekounam. En los próximos días debería resolverse tal necesidad.