Una treintena de representantes de asociaciones amigas del pueblo saharaui y cooperantes de la ONG MunduBat emprendieron ayer un viaje simbólico a los campamentos de Tinduf (Argelia), donde permanecerán hasta el viernes, para «demostrar su confianza» en la seguridad que las autoridades argelinas y del Frente Polisario proporcionan a los extranjeros.

El viaje, organizado por la Coordinadora Estatal de Asociaciones Amigas del Pueblo Saharaui, CEAS Sahara, se produce una semana después de que el Gobierno español evacuara a una docena de cooperantes, con el pretexto de haber recibido información sobre un supuesto plan específico de secuestrar a cooperantes procedentes del Estado español basado en fallos detectados en la seguridad del Frente Polisario.

La iniciativa será aprovechada para llevar un cargamento con ayuda humanitaria y medicamentos y hacer una llamada contra el abandono que podría suponer la retirada de los proyectos de cooperación.

Cooperantes de Médicos del Mundo también regresarán hoy a Tinduf, donde se quedarán.

El presidente de MunduBat, Iñaki Markiegi, defendió que se debe mantener la solidaridad y el apoyo al pueblo saharaui, con la presencia de cooperantes en Tinduf, pese a admitir que «cada vez hay más inseguridad en la región».

50.000 euros

La Diputación Gipuzkoa destinará 50.000 euros a paliar la grave crisis alimentaria que se vive en los campamentos y territorios liberados del Sahara Occidental. La incidencia de la crisis económica en la solidaridad internacional con el Sahara ha aumentando la demanda de alimentos debido al recorte de las aportaciones de los organismos internacionales, que no cubren el 50% de las necesidades alimentarias básicas, y a que ha disminuido el número de niños acogidos en verano, el número de estudiantes en el extranjero y el apoyo financiero a los huertos familiares y comunitarios.