Dos fuertes terremotos dejan al menos 180 muertos en el noroeste de Irán
Las autoridades iraníes informaron ayer de la muerte de al menos 180 personas como consecuencia de los dos terremotos de más de 6 grados de intensidad registrados en la provincia de Azerbaiyán Oriental. Hasta seis pueblos quedaron totalmente destruidos.
GARA | TEHERÁN
Los muertos a consecuencia de los dos fuertes terremotos, de 6,2 y 6 grados en la escala Richter, que sacudieron ayer el noroeste de Irán, ascendían a última hora de ayer a al menos 180 y se temía que pudieran aumentar, mientras los heridos eran alrededor de 1.300, según el último balance de las autoridades persas.
Las zonas afectadas son los distritos de Ahar, Varzhagam, Haris y Mehraban, según el director de Gestión de Emergencias Azerbaiyán Oriental, Jalil Saie, quien agregó que «60 aldeas han sufrido daños de entre el 68% y el 80% y, además, hay seis aldeas totalmente arrasadas». Saier pidió a la población que no cediera al pánico y le recomendó que pasara la noche fuera de sus casas, en lugares abiertos, para evitar posibles desplomes de estructuras ya afectadas por los terremotos principales.
Según el Centro Sismológico de Irán, el primero de los seísmos ocurrió a las 12.23 GMT y se sintió con fuerza en la ciudad de Ahar, y el segundo, a las 12.34 GMT, sacudió la población de Varzagan, ambas en Azerbaiyán Oriental.
Tras los dos terremotos principales, que se produjeron con una diferencia de 11 minutos, se registraron en la zona una veintena de réplicas de diferentes magnitudes, lo que causó el pánico de los habitantes de la región que salieron a las calles huyendo de sus casas que temblaban.
En Varzhagam, una de las más afectadas, explotó un gasoducto debido a los terremotos, según ISNA, aunque no se precisó si este suceso causó más víctimas.
Además del gas, cuyo suministro se suspendió en unas 70 poblaciones del área, también se cortaron buena parte de las líneas eléctricas y las comunicaciones telefónicas por cable.
Por su parte, las autoridades locales informaron del envío inmediato de equipos y material de rescate al área de los seísmos, unos 60 kilómetros al noreste de la ciudad de Tabriz, la capital de la provincia iraní de Azerbaiyán Oriental, fronteriza con Azerbaiyán y Armenia.
Desde Tabriz, ciudad de millón y medio de habitantes, la ruta directa a Varzagan quedó cortada y los equipos de rescate tuvieron que utilizar caminos alternativos y helicópteros. Los equipos de rescate, que cuentan con perros entrenados en la localización de personas atrapadas, sacaron de entre las ruinas con vida a más de 200 sepultados.
Irán está situado sobre varias fallas importantes y ha sufrido seísmos devastadores a lo largo de su historia. El más importante de los últimos años, en diciembre de 2003, mató a 31.000 personas en Bam (sur), es decir una cuarta parte de su población.
El terremoto más mortífero de las últimas décadas en Irán, situado en una zona de constantes movimientos telúricos, se produjo en junio de 1990 en el noroeste del país, en las provincias de Gilan y Zanjan, con al menos 37.000 muertos y más de 100.000 heridos.