Se perdió toda la pasada temporada y el final de la anterior por una lesión sufrida el 3 de abril de 2011, una fractura del quinto metatarsiano del pie izquierdo. Una lesión que suele tener de baja a los futbolistas tres meses se complicó y ha tenido que ser operado en seis ocasiones, en Iruñea y en Alemania. En este tiempo seis kilos ha perdido. Apenas ha comparecido ante la prensa en todo este tiempo. Un tiempo en el que ha derramado muchas lágrimas, pero en el que, reiteró, nunca se ha sentido solo. Y ayer lo agradeció.

Tras el entrenamiento matutino, compareció en sala de prensa el jugador Masoud Shojaei, que se ha quedado sin su compatriota Nekounam como compañero -«me da pena porque hemos estado juntos cuatro años, pero somos profesionales, tenemos que seguir nuestro trabajo y nuestra vida», dijo-.

Una comparecencia extensa y muy emotiva la del iraní, en la que echó la vista atrás y recordó los 15 meses que ha permanecido alejado de los terrenos de juego. Ahora, completamente recuperado de su lesión, explicó cuál es su estado físico: «Estoy muy bien ahora. No al cien por cien, pero sí mucho mejor. Cada entrenamiento y cada partido voy cogiendo confianza. No tengo dolores ni molestias aunque me falta algo de ritmo. Incluso estoy con menos peso que antes de la lesión. Necesito tiempo después de una lesión tan larga para poder estar a tope».

«He pasado momentos duros»

El futbolista asiático aprovechó para agradecer el apoyo que ha recibido a lo largo de estos meses: «Quiero dar las gracias al club y a mis compañeros. Nunca he tenido un mal sentimiento por estar lejos de mi país o de mi familia; todos me han apoyado mucho. Solo puedo dar las gracias a todo el mundo, incluida a toda la afición que siempre me ha mostrado su cariño en la calle y en la grada. Muchas gracias a todos: a los médicos, a los fisios, al utilero, a los trabajadores de Tajonar... No sé cómo poder contestar». Palabras que no ocultan los momentos complicados que ha tenido que pasar.

Masoud reconoció que «he pasado momentos muy duros y ha sido muy difícil; casi lloraba. Al principio estaba muy triste pero luego, después de ir a Alemania, cogí confianza y quería hacer una vida normal pensando en el futuro. Ahora estoy bien, principalmente, por todo el apoyo que he recibido», desgranó muy sentido.

Aclaró que no pasó en su cabeza nunca dejar el fútbol, «pero ha habido momentos que he estado super triste. Sobre todo cuando me dijeron en la Clínica San Miguel que me tenía que operar otra vez, cuando yo pensaba que me iban a decir que ya podía jugar. Fue un momento muy duro... -confesó ante los micrófonos un Masoud muy emocionado y con un nudo en la garganta-. De verdad que me he sentido muy bien en este club y no creo que en otro club hubiese tenido este sentimiento. Este vestuario es especial».

Masoud, que solo coincidió dos meses con el técnico José Luis Mendilibar estando bien de salud, agradeció especialmente la confianza depositada en él por parte del entrenador vizcaino. «Nunca olvidaré su apoyo. Cuando me fui a Alemania (a operarse) me dijo que fichaba un nuevo jugador para la próxima temporada. Cuando me dijo eso me quedé muy bien».

«Pocos entrenadores van a hacerlo con un jugador que no conocen. Era más fácil decir no quiero a este jugador que está lesionado. Me he sentido muy bien en este club. No creo que con otro club tendré un sentimiento como aquí. Los jugadores que vienen de fuera dicen que tenemos un vestuario que es clave», reveló.

Volver sin prisa

Su regreso a los terrenos de juego se produjo el pasado 18 de julio en el partido amistoso que el Osasuna disputó en Huesca: «Quería empezar normal, pero me sentía raro. Hice un mal partido porque quería hacer de todo... Pero el míster me animó. Nunca había tenido una lesión tan larga y me he dado cuenta de que tenía que volver poco a poco. Sin prisa. Tengo muchas ganas de empezar la temporada. Este año no me quiero perder ningún partido», declaró convencido el jugador. Un Masoud que también mostró su lado más solidario.

El jugador tuvo palabras de solidaridad para las víctimas del terremoto que devastó una zona del noreste de Irán el pasado 11 de agosto: «Estoy muy triste por la gente porque ha sido en tres pequeños pueblos y ha habido más de 300 muertos. Quiero hacer algo desde la distancia pero no puedo. Solo puedo decir lo mucho que lo siento. Ojalá que la situación se vaya mejorando poco a poco y que el gobierno ayude a esta gente».

El de Masoud es el ejemplo de que después de la tempestad que fue la salida de jugadores, Osasuna ha recobrado la calma y la ilusión. Si algo han evidenciado las palabras no solo del iraní sino de otros jugadores rojillos que vienen hablando estos días o de aquellos que acaba de recalar en el club, son los valores de la entidad. Con estas armas, Osasuna prepara ya su debut del lunes, a las 19.00 (Gol TV, en exclusiva), con el anuncio de las peñas deportivistas de que llevarán a cabo una protesta en Riazor para quejarse por los horarios de los partidos.