Del Estadio Olímpico de Londres al de Estocolmo, que celebra su centenario. Cinco días después de la clausura de los Juegos, las estrellas del atletismo continúan su temporada en los mítines veraniegos. Once recientes campeones olímpicos estrenan su condición esta tarde en la reunión sueca, décima etapa de la Diamond League a donde algunas carreras llegan con aires de revancha.

Ese es el caso de los 400 metros donde Sanya Richards, oro, ya ha avisado que va a por el diamante con el que Estocolmo premia a aquellos atletas que logran batir el récord de la reunión, aunque para ello mucho tendrá que apretar en la vuelta a la pista ante Christine Ohuruogu y DeeDee Trotter, las dos mujeres que le acompañaron en el podio londinense.

Exactamente lo mismo ocurre en los 3.000 metros obstáculos, con la rusa Zaripova, la tunecina Ghribi y la etíope Sofia Assefa o en la longitud con Brittney Reese, Yelena Sokolova y Janay DeLoach. En el salto con pértiga la ausencia de Isinbayeva, que dio por cerrada su temporada tras el bronce, impedirá la réplica aunque sí estarán sus dos verdugos, la americana Jennifer Suhr y la cubana Yarisley Silva. En categoría masculina, también se reeditan duelos recientes como el de 400 metros vallas entre el dominicano Félix Sánchez (oro) y el estadounidense Michael Tinsley (plata) o el que podrían repetir Christian Taylor y Will Claye, autores del doblete USA en triple salto.

Makhloufi, en 800 metros

En altura, por ejemplo, se enfrentarán dos rusas, la campeona en Londres Anna Chicherova y la medalla de bronce Svetlana Skholina a la ganadora en Beijing'2004 Tia Hellebaut.

Los 800 metros no tendrán al genial Rudisha, pero sí a Taoufik Makhloufi, el argelino que abandonó precisamente esta prueba, según dijo por no agravar una lesión de rodilla, para después colgarse el oro en 1.500 tras haber sido excluido y luego readmitido. A Makhloufi le han dejado la prueba estelar, la que cierra el programa.

Completan la nómina de ganadores los lanzadores Tomasz Majewski (peso), Sandra Perkovic (disco) o Valerie Adams, que se colgó la medalla de plata y luego ascendió un peldaño tras la descalificación por dopaje de la bielorrusa Ostapchuk.