La defensa de Iosu Uribetxebarria presentó a primera hora de ayer ante el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, el mismo que la víspera dictó la libertad condicional para el de Arrasate, un escrito en el que solicitó la ejecución del auto y su inmediata puesta en libertad, ya que el juez José Luis de Castro ha decidido mantenerlo preso en la misma habitación del Hospital Donostia en la que fue ingresado hace hoy justo un mes. La habitación está custodiada por la Ertzaintza y las visitas están restringidas, entre otras medidas.

Su abogada, Arantza Aparicio, anunció ayer que el mismo Uribetxebarria solicitó por escrito -aunque fue entregado por Aparicio ante el juzgado de guardia de Donostia- el amparo judicial establecido en la Ley Orgánica 6/1984 que regula el procedimiento de Habeas Corpus «por considerar que me encuentro privado de libertad sin que sean respetados mis derechos».

En ambas solicitudes, el preso se ha amparado en el apartado 5 de la disposición adicional 5º de la Ley Orgánica 6/85, donde se determina que «el recurso tendrá efecto suspensivo que impedirá la puesta en libertad del condenado hasta la resolución del recurso, o en su caso, hasta que la Audiencia Provincial o la Audiencia Nacional se haya pronunciado al respecto».

Teniendo en cuenta que aún la resolución no ha sido recurrida en apelación -único recurso que cabe- por ninguna de las partes, Aparicio defiende que el juez De Castro «se ha excedido en sus funciones, ya que no es competente para suspender la ejecución de la resolución». La competencia exclusiva la tiene la sala correspondiente de la Audiencia Nacional española.

Además de considerar inconstitucional y nula la no ejecución del auto, la defensa del preso considera que una vez resuelta la libertad condicional, no cabe más por parte del juez que la notificación del mismo al centro penitenciario y al penado, con la consiguiente puesta en libertad de Uribetxebarria. Él mismo denuncia en el Habeas Corpus que está privado de libertad «de forma ilegal».

Posibilidad de recurso

Si la Fiscalía solicitara la suspensión del auto, la ley establece que este tipo de procedimientos deben resolverse «con urgencia», aunque no establece plazos, por lo que continuaría preso hasta la decisión definitiva.

Según indicaron ayer fuentes de la Fiscalía a Europa Press, la acusación pública estudiará «con detenimiento el complejo» auto del juez central de Vigilancia Penitenciaria y tomará una decisión al respecto el lunes o martes de la semana que viene, aunque tiene de plazo hasta el jueves. Será el fiscal coordinador de vigilancia penitenciaria, Pedro Rubira, quien informe sobre este extremo.

En el caso de que la Fiscalía recurriera en apelación, Aparicio dijo que De Castro podría pedir la suspensión de la ejecución de la libertad para Uribetxebarria, pero recordó que «nunca puede decidirlo el propio juez mediante auto», tal y como ha procedido en este caso.

Las mismas fuentes señalaron que el auto sería examinado por los cinco jueces de la Sección Primera de la Sala de lo Penal, que preside el magistrado Fernando Grande-Marlaska. Los otros cuatro magistrados que integran el tribunal son Manuela Fernández de Prado, Ramón Sáez, Javier Martínez Lázaro y Nicolás Póveda.

Nueva batería de iniciativas

Después de que con la concesión de la libertad condicional se dieran por finalizadas las huelgas de hambre, Herrira también dio ayer por concluida la concentración diaria de doce horas que ha mantenido durante todo el mes de agosto. No obstante, tal y como lo anunciaron ayer sus miembros Nagore García y Beñat Zarrabeitia, continuarán con las movilizaciones para pedir la libertad de los otros trece presos vascos con enfermedades graves e incurables.

Desplegada el jueves por la noche la pancarta que pedía la libertad del de Arrasate, ayer, en la última concentración que se llevó a cabo a su favor frente al centro hospitalario, desplegaron otra que rezaba en euskera «Que no vuelva a ocurrir. Los trece a casa».

En este sentido, Zarrabeitia remarcó el «compromiso» de este colectivo por «seguir trabajando, con mayor ímpetu y determinación si cabe», hasta poner fin a la actual política penitenciaria, «articulando amplias mayorías» y «llamando a la movilización ciudadana» para defender los derechos de los presos. En los próximos días anunciarán nuevas actuaciones y, por el momento, llamaron a acudir a la manifestación de hoy en Donostia.

Realizaron una lectura más sosegada sobre la decisión de De Castro, y señalaron que «el titular de ayer [por el jueves] era el que deseaba la mayoría de la sociedad vasca y todas las personas y organismos defensores de los derechos humanos». No pasaron por alto que la situación real es que a Uribetxebarria no le ha sido concedida la libertad que le corresponde. Por eso añadieron: «Es una noticia que debe venir acompañada de hechos, Iosu está gravemente enfermo, ha sido puesto en libertad y la aplicación práctica de la misma debe ser inmediata». Así las cosas, Herrira no contempla otro escenario que el de Arrasate volviendo a casa.