La delegada del Gobierno español en Nafarroa, Carmen Alba, destacó ayer que la Guardia Civil y el resto de cuerpos policiales realizan «un trabajo ejemplar», al tiempo que destacó que «los integrantes de estos cuerpos policiales han sido objetivo y víctimas de la banda terrorista ETA, y gracias a su labor y entrega han conseguido que la banda se encuentre en su punto más débil».

Alba respondió de este modo a los concejales de Bildu, NaBai y el PSN de Altsasu que el sábado comparecieron para denunciar el acoso policial que sufre esta localidad de Sakana, destacando que en esta población tienen una tasa de 9,2 policías por 100 habitantes, el triple del promedio en Nafarroa y seis veces más de la tasa en el Estado español. Por ello, reclamaban a los cuerpos policiales que superen las políticas de excepción y abandonen prácticas como el control social, las amenazas, la persecución política o las denuncias sin justificación.

Asimismo, Alba también criticó «la parodia realizada por algunos radicales en la que escenifican la expulsión de la Guardia Civil del cuartel». La delegada del Gobierno español se refería a la celebración de Ospa Eguna, que tuvo lugar también el sábado en Altsasu para reclamar el fin de la ocupación policial de la localidad.

Alba también mostró su extrañeza por el hecho de que en la comparecencia de Altsasu participara un concejal del PSN. «Los socialistas navarros conocen de primera mano las dificultades que padecen ciertas personas y partidos para desarrollar su labor por tener una ideología distinta de la nacionalista», declaró.

«Esta es la segunda vez en un mes que desde la Delegación del Gobierno se respalda y apoya de forma pública a todos los profesionales de los cuerpos y fuerzas policiales que trabajan en Alsasua, después de que la alcaldesa de la localidad instara a abandonar el pueblo a todos los profesionales de los cuerpos y fuerzas de seguridad, a través de una moción presentada en el Pleno municipal a principios de agosto de este año», lamentó Carmen Alba.

La delegada del Gobierno español hacía referencia a una moción apoyada por la mayoría del Pleno de Altsasu por la que, tras recibir numerosas denuncias de abusos policiales por parte de vecinos de la localidad, se decidió crear una comisión sobre represión que reclamó a las fuerzas policiales que respeten los derechos de la ciudadanía, especialmente el derecho a la libertad de expresión, el derecho a manifestación y el derecho a llevar a cabo un trabajo político.