Tres derrotas en otras tantas jornadas
Medio siglo después, se repite el peor inicio liguero
Se trata, en cualquier caso, de una primera tayectoria a la que está acostumbrada la escuadra rojilla.
Natxo MATXIN
A Osasuna le cuesta carburar. Lo habitual es que sus inicios de competición sean casi siempre bastante irregulares, marcados más por los malos que por los buenos resultados. La 2011-13 no ha sido una excepción, solo que en este caso se ha vuelto a repetir una marca que no se producía desde la 1956-57: los rojillos no han sumado ni un punto en las tres primeras jornadas.
El dato, en todo caso, hay que relativizarlo, pues junto a esa negativa costumbre hay que ponderar que dos encuentros los ha tenido que jugar fuera de casa, bien es cierto que ante rivales recién ascendidos, y que el que jugó en casa lo hizo ante el todopoderoso Barça, mostrando los locales un gran nivel, y perdiendo por los errores arbitrales de Muñiz Fernández.
Sin embargo, las paupérrimas sensaciones mostradas por los de Mendilibar en Balaídos -solo se libraron los primeros quince minutos con el larguero de Llorente como principal argumento- han dejado un ánimo en el entorno osasunista de que quizás resulte más complicado de lo que se cree salir de esos puestos de abajo y de que ya se echan de menos algunos de los hombres que hicieron las maletas este verano.
Lo cierto es que, como se ha mencionado, Osasuna no es un conjunto de grandes comienzos y ello se ha visto refrendado en su última trayectoria en Primera. De las doce campañas que ya acumula en este reciente periplo, en la mitad de ellas la escuadra navarra no consiguió ganar en ninguno de esos tres primeros choques, y en un tercio de esas temporadas se plantó en la cuarta jornada con solo un punto en su casillero.
Capacidad de reacción
Semejante bagaje no ha sido obstáculo para que el equipo haya dado muestras de que se ha ganado a pulso estar esos doce años entre los equipos de élite. Porque si algo se puede destacar del vestuario rojillo es su capacidad de reacción ante la adversidad. Cuanto peor le han ido las cosas, mejor ha sabido desenvolverse para sacar la cabeza y volver a respirar.
Episodios hay unos cuantos de fácil recuerdo para el aficionado, pero por ponernos en una situación muy similar a la actual, hace dos temporadas, con Camacho en el banquillo, Osasuna se plantó con un punto en la cuarta jornada y la necesidad de ganar en El Sadar a una Real que venía embalada, objetivo que se consiguió.
Algo parecido va a ocurrir con la visita del Mallorca -imbatido y que ocupa la segunda plaza, con siete puntos-, ante el que los pupilos de Mendilibar a buen seguro van a salir bastante más concienciados de lo que hay en juego que lo que mostraron frente al Celta. El parón liguero va a prolongar esas ganas que todo futbolista posee de tener una cita cuanto antes, tras un mal resultado.
La peor diferencia de goles con respecto al Espanyol hace que Osasuna caiga al último lugar de la tabla clasificatoria. Rojillos y periquitos son los únicos equipos que hasta el momento no han conseguido puntuar.
«Cuando las cosas no salen bien, cuanto antes tengas el próximo partido mejor, pero vamos a verlo por el lado positivo y pensar que hay más tiempo para preparar el choque», manifestó Marc Bertrán, confirmando que el parón liguero tendrá sus aspectos buenos y malos.
A juicio del lateral catalán, Osasuna «ha merecido un poquito más en el cómputo general», aunque reconoció que el equipo debe mejorar atrás, después de encajar seis goles en tres partidos.
«Tenemos que ser consistentes y mejorar estos registros. Debemos ser fuertes en casa y ahí sacar muchos puntos», admitió. N.M.
Osasuna y Real disputarán un derbi amistoso el próximo viernes -El Sadar, 19.00-, con el objetivo para ambas escuadras de mantener la tensión competitiva. Los dos conjuntos vascos llegan a la cuarta jornada tras haber perdido en sus respectivos desplazamientos.
La plantilla osasunista regresa hoy al trabajo. Todas las sesiones de la presente semana diseñadas por Mendilibar comenzarán a las 10.00 en las instalaciones de Tajonar. El técnico vizcaino dará descanso a sus hombres el fin de semana -sábado y domingo- por el parón liguero..