Los sindicatos con representación en la Administración foral auguran un «otoño caliente» de protestas y desencuentros con el Gobierno navarro, ya que prevén un incremento en los recortes, ante el que afirman que no se quedarán «con los brazos cruzados».

Así lo señaló Javier Barinaga, de CCOO, en nombre del medio centenar de funcionarios concentrados ante la puerta principal del Palacio de Nafarroa, convocados por los sindicatos AFAPNA, ANPE, APF, CCOO, CSIF, ELA, ESK, LAB, SAE, SATSE, Solidari, SPA, STEE-EILAS y UGT, para protestar contra los recortes en la Administración pública, una convocatoria que se repitió ante otros edificios públicos de Iruñea, Tutera, Tafalla y Lizarra.

«Vamos a seguir durante el mes de setiembre con concentraciones en multitud de centros de trabajo», afirmó Barinaga, quien recordó que las centrales han convocado además otras iniciativas, como una marcha a Madrid el día 15 y la huelga general el 26 en el caso de la mayoría sindical vasca.

Paga compensatoria

Barinaga subrayó que no han llegado «al final del camino en este aspecto y nosotros no nos vamos a resignar a quedarnos parados y con los brazos cruzados». Preguntado por las iniciativas presentadas por los grupos de la oposición, que suman la mayoría del Parlamento frente a UPN y PP, encaminadas a que la supresión de la paga extraordinaria de los funcionarios no se haga efectiva en Nafarroa, valoró la posibilidad de acordar una paga compensatoria de esa pérdida del 7% de poder adquisitivo.

Al respecto, señaló que desde mediados de 2010 los funcionarios han perdido un 13% de poder adquisitivo, lo que se une al aumento de su jornada laboral, la implantación en junio de «medidas de recorte de derechos», y al «deterioro de los servicios públicos», lo cual supone «un fraude para los trabajadores y para la sociedad».