Los quebeçois votaron ayer para elegir a sus diputados de la Asamblea Nacional al término de una campaña marcada por un deseo de cambio, después de una protesta estudiantil sin precedentes que comenzó en primavera y que debería traducirse en la vuelta al poder de los independentistas, primera fuerza según las encuestas.

«Espero que nos libremos de este Gobierno, ya es hora», dijo Damiel Peterkin delante de un colegio electoral en el centro de Montreal tras depositar su voto.

Otros votantes, no son de la misma opinión y creen que el cambio de Gobierno no se va a dar con tanta facilidad. «Yo no soy tan positiva», declaró una anciana.

Los casi seis millones de votantes que estaban llamados ayer a votar debían elegir a 125 diputados de la Asamblea.

Las diferencias entre los tres principales partidos, -el Partido Liberal, el Patido Quebeçois y la Coalición Futuro Quebec- no es muy grande según las encuestas, aunque si sus propuestas.