Un iPhone con pantalla más grande, pero más fino y ligero
Apple presentó ayer el iPhone 5, que incluye una pantalla retina de cuatro pulgadas, conexión a internet de alta velocidad LTE y que es un 18% más fino y un 20% menos pesado que su predecesor. Con 7,6 milímetros de grosor y 112 gramos de peso, el teléfono incorpora un nuevo chip (A6) que le permite responder más rápido y doblar su rendimiento gráfico.
Violeta MOLINA (EFE) | LONDRES
Una de las grandes novedades del iPhone 5 que Apple presentó ayer en San Francisco, California, es la tecnología de conexión a altas velocidades LTE -hasta 100 megas por segundo-, una mejora que no podrán disfrutar todos los usuarios del teléfono, ya que estas redes están implantadas en muy pocos territorios. Según Apple, la duración de la batería también se ha incrementado.
Otro de sus cambios con respecto al iPhone 4S es un conector un 80% más pequeño, que pasa de 30 a 8 pines y se llama Lightning -para hacerlo compatible con amplificadores de música y otros accesorios de iPhone existentes los usuarios necesitarán un adaptador-.
El mayor número de pulgadas se traduce en una mayor altura del dispositivo, pero su anchura no ha variado: las dimensiones de la pantalla retina son 1.136 por 640 píxeles y su saturación del color se ha incrementado en un 44%. Con la nueva medida el iPhone 5 tendrá 5 filas de aplicaciones, en lugar de cuatro. Pese al cambio, el responsable de marketing de Apple, Phil Schiller, aseguró que las «apps» desarrolladas para anteriores modelos de iPhone seguirán funcionando sin necesidad de adaptación.
La cámara trasera es un 25 por ciento más pequeña, dispara un 40% más rápido que la del iPhone 4S y lleva incorporado un cristal de zafiro para proteger las lentes y ofrecer mayor nitidez.
El dispositivo contará con la nueva versión del sistema operativo móvil iOS 6, cuya principal novedad es la aplicación de mapas y navegación -después de que Apple se desligara de Google en este terreno-, con 100 millones de puntos de interés y vistas reales como tridimensionales.
Entre 200 nuevas funcionalidades, en iOS 6 destaca Passbook, una aplicación para organizar billetes y cupones, Photo Stream, una «app» para compartir y comentar imágenes, y la integración con la red social Facebook -el asistente de voz Siri, por ejemplo, puede escribir en la red social con el dictado del usuario-.
21 y 28 de setiembre
El iPhone 5, que se lanzará en negro y en blanco combinado con plata, llegará a decenas de países a lo largo de este mes: el día 21 aterrizará en Estados Unidos, Canadá, Estado francés, Gran Bretaña, Alemania, Australia y Japón, mientras que el 28 de setiembre saldrá a la venta en otros 22 territorios, incluido el Estado español. Un poco antes, el día 19, los dispositivos iPhone ya existentes en el mercado podrán actualizar el software a iOS 6 de forma gratuita.
Sus precios, asociados a contratos con operadoras de telecomunicaciones, serán de 199 dólares para el modelo de 16 gigas, de 299 dólares para el de 32 gigas y de 399 para el de 64 gigas.
El consejero delegado de Apple, Tim Cook, sostuvo durante la presentación mundial del producto -retransmitida vía streaming para la prensa europea reunida en Londres- que este nuevo teléfono eleva a un «nuevo nivel» la categoría de «smartphone», si bien sus novedades han causado poca sorpresa porque la prensa especializada las había adelantado.
En el acto, pese a ser bastante largo, se vio a un Cook más relajado -incluso bromeó en varias ocasiones- que en las anteriores conferencias de prensa en las que figuró como sustituto del fallecido Steve Jobs.
En redes sociales como Twitter también hubo muchos seguidores que destacaron la falta de novedades del nuevo dispositivo pero que aseguraron que «la pantalla impresiona, es ligero y rapidísimo».
400 millones vendidos
Apple también ha desarrollado nuevos modelos de sus reproductores musicales iPod Touch, iPod nano y Ipod Shuffle. Al margen del teléfono y de los reproductores, la compañía de la manzana ha rediseñado su tienda musical iTunes y sus auriculares, que pasan a ser esféricos.
Durante la rueda de prensa, Apple anunció que hasta el pasado junio había vendido 400 millones de dispositivos con su sistema operativo iOS, 84 millones de los cuales corresponden a iPads. Según Cook, Apple ostenta el 68% del mercado de las tabletas y los iPads constituyen el 91% del tráfico web procedente de este tipo de dispositivos: «No sé lo que el resto de las tabletas están haciendo», dijo en tono irónico.
El consejero delegado también destacó que Mountain Lion ha registrado 7 millones de descargas y que Apple tiene 380 tiendas en el mundo.
Han pasado cinco años desde que Steve Jobs se sacara de la manga de su discreto jersey negro de cuello alto el primer iPhone, un dispositivo de diseño que sacudió el maduro sector de la telefonía y desató una revolución tecnológica cuyo ciclo da muestras de agotamiento. El anuncio del iPhone original en enero de 2007 generó tanto entusiasmo entre los fieles de Apple como incredulidad entre los analistas que no entendían cómo un aparato de 500 dólares, sin teclado físico ni 3G iba a hacerse un hueco entre los populares y más económicos Nokia y las modernas BlackBerry. Ni Steve Ballmer con su Windows Mobile, ni los directivos de Research in Motion (RIM) con su BlackBerry, ni los finlandeses de Nokia se olieron lo que les venía encima. El resto del sector, tampoco. Un lustro después de aquello, Nokia cedió su liderazgo mundial en fabricación de móviles a Samsung, desechó su desfasado sistema operativo Symbian y se alió con Microsoft, que adaptó a los tiempos del iPhone su Windows Mobile, rebautizado Windows Phone, ahora con pantalla táctil y teclado digital. BlackBerry está sumido en una profunda crisis y ha tenido que despedir a miles de empleados en vista de su pérdida de competitividad.
Fue precisamente Google, otro novato en el sector de la telefonía, quien puso sobre la mesa el único sistema capaz de acotar, hasta el momento, al fenómeno iPhone. En 2008 debutaron los primeros teléfonos equipados con Android que básicamente replicaban la idea que le había funcionado a Apple aunque con un modelo de negocio distinto, en vez de fabricar sus propios dispositivos les ofrecían gratis a las compañías de electrónica un sistema operativo capaz de competir con el iPhone. Samsung, HTC, Motorola (que adquirió Google) y otros adoptaron Android ansiosos por subirse rápidamente al carro de lo táctil y las aplicaciones, y Steve Jobs enfureció. Con la ayuda de Android, teléfonos como el nuevo Samsung Galaxy s3 no solo han conseguido alcanzar al iPhone en el último lustro, para muchos expertos incluso lo superan en prestaciones lo que pone en cuestión la capacidad de Apple para seguir liderando el cambio en un sector que reinventó y que empieza a poner a cada uno en su lugar. Lo que empezó siendo en 2007 un desafío movido por la innovación ha pasado en 2012 a ser una guerra de patentes. A pesar de todo, es de prever que el esperado iPhone 5 volverá a causar furor, igual que sus antecesores, y batirá récord de ventas. Pero es la falta de factor sorpresa lo que empieza a pesar sobre el exitoso iPhone. Fernando MEXÍA (EFE)
Los precios, asociados a contratos con operadoras de telecomunicaciones, serán de 199 dólares para el modelo de 16 gigas, de 299 dólares para el de 32 gigas y de 399 para el de 64 gigas.