«A pesar de todos los problemas que hemos tenido, las sensaciones son buenas». Con un buen semblante pero sin renunciar a su seriedad habitual, Dusko Ivanovic afrontaba el estreno liguero en Zaragoza sin perder el optimismo, y confiado en las posibilidades de los suyos.

El pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza es el lugar que el azar quiso que supusiera el estreno de un renovado Caja Laboral Baskonia en la temporada 2012/13. La plantilla dirigida por Dusko Ivanovic tomará su primer contacto con la competición oficial en el contexto de una plantilla que busca sus nuevos referentes, después de la marcha de Prigioni y Teletovic.

«Como cada año, el equipo ha perdido jugadores que eran pilares. En ese sentido, no afrontamos nada nuevo, y para suplir esas ausencias hemos fichado a nuevos jugadores. Veremos si nuestro juego se asemeja o no respecto al año pasado en función de si nos dan cosas diferentes. La cuestión es que el equipo será lo que deba ser en función a la calidad de los jugadores», opinaba el montenegrino.

La derrota más abultada

El CAI Zaragoza es el primer adversario de los gasteiztarras. A pesar de no realizar una pretemporada muy buena, el cuadro maño merecía los respetos de Ivanovic. «CAI Zaragoza tiene ya el equipo completo y, para mí, es un equipo que demostró en la Supercopa ser muy competitivo y que ha fichado muy bien, sobre todo en lo que a tiradores se refiere y que en su cancha siempre juega bien».

Sobre esa cuestión, cabe recordar que el Baskonia recibió el año pasado su derrota más abultada precisamente en el feudo aragonés, en el que cayeron por 86-66. Sin embargo, el preparador baskonista recordaba que aquella derrota llegaba en las primeras jornadas, en las que «estos primeros partidos no muestran el estado real de los equipos. Eso sí, creo que hará falta paciencia y tiempo, porque vamos a sufrir mientras no estemos completos».

El cuadro baskonista llega a Zaragoza con la única baja de Milko Bjelica, después de que Lampe se uniera a la expedición gasteiztarra a última hora, aunque no se espera que juegue.

Entre los que sí jugará está Carlos Cabezas, que se enfrenta a su último exequipo. El base marbellí opinaba que «volver a lo que ha sido mi casa será especial. Para ganar al CAI, tendremos que estar preparados para jugar un partido muy serio».