El Atlético Guardés, que en la pasada jornada se había impuesto en Porriño en el primer derbi gallego de la historia de la División de Honor, dio ayer un paso más para situarse como aspirante a equipo revelación de la temporada. Una plantilla muy peleona, pero con calidad y jugadoras con experiencia y talento, tuvieron contra las cuerdas a Bera Bera, que necesitó apoyarse en dos de sus más cualificadas veteranas (11 goles de Eli Pinedo y 8 de Eider Rubio) para minimizar daños y llevarse al menos un punto.

Bera Bera estuvo a remolque durante todo el primer tiempo, en el que además perdió a su capitana Matxalen Ziarsolo por una lesión muscular, pero logró igualar antes del descanso, e incluso se puso hasta tres goles por delante en la reanudación, dando la sensación de que había resuelto las dificultades.

Sin embargo, el Atl. Guardés remontó y volvió a ponerse por delante, forzando a Bera Bera a entregarse a fondo para tratar de puntuar. El empate llegó a dos minutos del final, y Bera Bera dispuso del balón para ganar el partido, pero los árbitros señalaron una falta de ataque de Patricia Elorza que impidió el último remate donostiarra y sentenció el marcador final con un empate que hizo justicia.