Los debates electorales ponen de relieve la antítesis entre BNG y PP
Mientras dure la campaña de las elecciones en Galicia y la Comunidad Autónoma Vasca NAIZ colaborará con el medio gallego «Sermos Galiza» para informar de las elecciones autonómicas que se celebrarán el 21 de octubre en ambas partes. De este modo, hoy comenzamos un intercambio de crónicas para ofrecer información de primera nuestros lectores.
X.P. IGREXAS («SERNA GALIZA») | SANTIAGO
La campaña electoral en Galiza, donde también se celebrarán elecciones al Parlamento autonómico el próximo 21 de Octubre, se ha clarificado enormemente después de que tuviesen lugar esta semana tres debates electorales en los que se cruzaron, de dos en dos, los candidatos a la Presidencia de la Xunta de Galiza de las principales fuerzas políticas. Alberto Núñez Feijóo, por el Partido Popular; Pachi Vázquez por el PsdeG-PSOE y Francisco Jorquera por el Bloque Nacionalista Galego.
El primer cara a cara tuvo lugar este lunes y en el se midieron el candidato popular y el socialista. Se trataba del primer debate electoral en 19 años, el último se celebró en 1993 con Manuel Fraga, y por eso fue acogido con gran expectación y un importante índice de audiencia. Sin embargo, en términos generales el debate brilló por su ausencia. Tanto Feijóo como Pachi Vázquez acudieron con un mismo afán, trasladar los mensajes elaborados por su equipo de campaña sin tener en cuenta lo que dijese u omitiese su adversario.
El formato pactado entre los tres partidos no contribuyó a dinamizar el intercambio de posiciones, al contrarió, lo acartonó. Aún así el resultado quedo bastante claro. Feijóo lo perdió presa de su notable nerviosismo y de enferentarlo desde una posición a la defensiva.
Pachi Vázquez, a pesar de no ser un gran orador, consiguió arrinconar al popular en varias ocasiones a lo largo del debate, y colocar algunos de sus principales mensajes como, las promesas de dejar de financiar a los colegios concertados que segreguen por género o de recuperar la gratuidad de los libros de texto.
El martes hubo también debate. Fue el turno de contrastar las propuestas entre el BNG y el PSdeG-PSOE.
En él se impusieron las propuestas concretas del nacionalista Francisco Jorquera frente a las promesas difusas del candidato socialista quien se reiteró en varias ocasiones con lo dicho el día anterior.
A pesar de desarrollarse en un tono mucho más amable, en esta ocasión el BNG demostró con nitidez que su propuesta política vive pegada a los problemas reales de la mayoría social, como desempleo o servicios públicos. Así mismo, ante un Pachi Vázquez feliz consigo mismo después de la derrota de Feijóo en el primero manifestó con meridiana claridad la apuesta en favor del máximo autogobierno, camino de la soberanía. Por su parte el candidato socialista se limito a expresar su voluntad de cumplir la Constitución.
Pero si hubo debate real ese fue el de ayer. En un encuentro de alto contraste entre Jorquera y Feijóo, el debate dejó a las claras que el próximo 21 de octubre las y los gallegos tendrán que escoger básicamente entre dos modelos contrapuestos. De una parte continuar en las políticas de la derecha españolista y sus recortes, por la otra apostar decididamente por ejercer la capacidad de decidir para romper precisamente con las políticas de «austeridad» impuestas por Madrid y Bruselas. En ese sentido el candidato del BNG se mostró rotundo al afirmar que l@s nacionalistas no ejecutarán ningún recorte bajo ninguna circunstancia. Tampoco por «imperativo legal» anticipando que su apuesta es por un gobierno gallego «insumiso a los recortes».
Uno de los principales reproches formulados por Jorquera a Feijóo es su obediencia a Madrid. «Más que de Presidente ejerció de Delegado del Gobierno de Rajoy en Galiza» denunció. Frente a esa realidad el nacionalista contrapuso la necesidad de ejercer el máximo de autogobierno para que Galiza tenga voz y voto en las decisiones que afectan a cuestiones centrales de su economía, como la construcción naval, el sector lácteo o la pesca.
Los tres debates, a pesar de sus limitaciones, han servido para clarificar el panorama político gallego, situando en primer nivel la contraposición antitética entre la apuesta por un cambio de rumbo radical, orientado a satisfacer las necesidades de la mayoría social, que encarna el BNG y la amenaza continuista del Partido Popular.
En el marco del desfile militar del Día de la Hispanidad en Madrid, marcado por la austeridad -sin tanques ni aviones para ahorrar en tiempos de crisis- el rey español, en respuesta a las preguntas de los periodistas sobre la crisis política con Catalunya, espetó que «no me vais a sacar ni una palabra más. El jamón estaba muy bueno».