La Real presentó ayer una novedosa iniciativa que, gracias al acuerdo alcanzado con la aseguradora Reale, permitirá que los abonados que se hayan quedado en paro desde el 1 de enero de 2012, puedan tener gratis su abono de la próxima temporada. Merced al acuerdo alcanzado entre ambas entidades, todos los abonados blanquiazules contarán próximamente con un seguro colectivo de accidentes que los cubrirá también en casos de baja laboral por enfermedad o accidente y hospitalización por accidente.

La Póliza Colectiva, que tendrá como fecha de efecto el 1 de noviembre, ofrece protección al abonado cubriendo el importe del abono anual en caso de que éste quede en situación de invalidez permanente absoluta o parcial y fallecimiento.

A partir del 1 de enero de 2013, coincidiendo con la renovación de los abonos, se incluirán en la Póliza Colectiva de Accidentes tres garantías adicionales que proporcionan cobertura por el importe del abono realista anual ante situaciones de desempleo, baja laboral por enfermedad o accidente y hospitalización por accidente.

No obstante, gracias al acuerdo alcanzado entre ambas entidades, la fecha de efecto de estas garantías tendrán efecto retroactivo y se tendrá por referencia el 1 de enero de 2012, es decir, que cubrirá a aquellos abonados que hayan perdido su empleo durante el presente año. Eso sí, para poder tener derecho a estas garantías, el abonado ha de estar al pago del abono del año 2012 y previamente debía haber sido un trabajador por cuenta ajena con contrato indefinido, quedando en situación de desempleo durante más de 90 días consecutivos.

En el acto de presentación de esta iniciativa, el presidente realista Jokin Aperribay destacó que en el club «llevamos trabajando desde hace tiempo con Reale Seguros para proteger más al socio en estos momentos difíciles. Las personas son los motores del club y de nuestra filosofía».

Asimismo, el máximo mandatario realista quiso «dar las gracias a Reale Seguros por esta iniciativa, bonita y desgraciadamente oportuna que refleja el contenido económico de una situación complicada. La Real quiere estar cerca de los socios en estos momentos difíciles».

Aprovechando la presencia del presidente realista en sala de prensa, se le preguntó por varios de los temas de actualidad en el entorno realista, como el arbitraje de Ayza Gámez ante el Atlético de Madrid en Anoeta.

«El domingo ya ha pasado y hay que centrarse en Valladolid a tope. Tenemos una semana bonita que nos puede marcar el inicio de un mes de noviembre con muchos partidos en casa y mirando hacia arriba. Las fuerzas del club y del equipo las tenemos que centrar en un mismo objetivo, que es el partido de Valladolid. El arbitraje no nos gustó a ninguno, sufrimos bastante, hubo errores pero no nos van a dar puntos y hay que ir a buscarlos a Valladolid», señaló el dirigente realista.

También tuvo que pronunciarse sobe el incidente de Antoine Griezmann, que se fue de juerga a París con cuatro compañeros de la selección francesa sub-21 estando concentrado en Le Havre, a 221 kilómetros de la capital. El presidente realista dijo que están a la espera de la resolución que tome la federación francesa, que tiene prevista una reunión hoy mismo.

Cuatro partidos a Troin

Por otro lado, el Comité de Competición sancionó ayer con cuatro partidos al segundo entrenador de Philippe Montanier, Michel Troin, después de que Ayza Gámez recogiera en el acta que éste le había llamado «asesino» tras el partido del pasado domingo ante el Atlético de Madrid en Anoeta. Además de esos cuatro partidos, el castigo recoge dos multas, una de 3.000 euros al propio Troin y otra de 1.400 al club.

De esta manera, el comité hizo caso omiso a la carta que el club envió a la federación, en la que defendía que todo se trató de un malentendido achacado al desconocimiento del idioma. Troin asegura que la expresión utilizada cuando bajó al vestuario del árbitro fue «Assassin nous» -nos has matado-, una frase bastante utilizada en Francia cuando se entiende que un equipo ha sido perjudicado por un arbitraje.

Dentro de la dureza del castigo, en el club asumían el error de Troin pero esperaban un castigo mucho menos severo, el ayudante de Montanier no suele seguir los partidos desde el banquillo, sino desde el palco.