El grupo municipal de Bildu en Gasteiz ha descubierto que el Estado español ha dejado de pagar más de 140.000 euros al Ayuntamiento de la capital alavesa en concepto de recogida de basuras en instalaciones como la base militar de Araka, el cuartel de la Guardia Civil de Sansomendi, la sede de la Delegación del Gobierno español en la CAV (en la calle Fray Francisco) y la de la Sudelegación del Gobierno en Araba (en la calle Olagibel).

El concejal de Bildu Antxon Belakortu explicó que los edificios dependientes del Estado español pagan la tasa de basura en función de un cálculo diferente al que se aplica al resto de vecinos de Gasteiz y resultan claramente beneficiados a la hora de abonar el servicio.

«En concreto, Araka paga una cantidad alzada por la recogida de los 37 edificios del recinto, es decir, un montante aleatorio, sin relación alguna con el libro de tasas y, por tanto, sin sustento legal. Además, como también sucede en el cuartel de Sansomendi, se impide la entrada a los inspectores municipales y, por tanto, resulta imposible realizar el catastro», denunció Belakortu.

El edil soberanista precisó que en el cuartel de Sansomendi se declara una única vivienda, cuando son tres bloques de once pisos, y no se reconoce la existencia de una cantina que podría rondar los 300 metros cuadrados ni las oficinas habilitadas en esos bloques.

Por lo que se refiere a la sede de la Delegación del Gobierno español en la CAV, situada en el número 19 de la calle Fray Francisco, no se declara la existencia de oficinas, mientras que la Subdelegación, ubicada en los números 1 y 11 de la calle Olagibel, se ha declarado exenta del pago de la recogida, a pesar de que el libro de tasas del Ayuntamiento de Gasteiz no recoge exenciones.

Belakortu añadió que «tan solo el cuartel de Sansomendi nos debe más de 105.000 euros, pero el fraude total del Estado para con el municipio alcanza casi los 140.600 euros».

Los datos de Bildu muestran que el cuartel de Araka pagó en 2012 la cantidad de 1.447,44 euros, cuando por la oficina debería haber abonado 1.254,60, por la cantina 2.645 y por la residencia otros 2.645. Se «ahorró» solo el año pasado 5.097,16 euros. Esta irregularidad se repite en 2011, 2010, 2009 y 2008, que son los años de los que Bildu tiene datos. En Sansomendi se abonaron el año pasado 1.514,60 euros cuando se deberían haber pagado 37.655,16, lo que supone que solo el año pasado el Ayuntamiento dejó de ingresar 36.140,56 euros.

La Delegación del Gobierno abonó el año pasado 726,16 euros cuando debería haber pagado 1.108,60, lo que supone 382,44 euros menos, mientras que la Subdelegación pagó 1.254,60 euros en vez de los 3,763,80 que debía (2.509,20 menos).

Según el representante de Bildu, «esto ha sucedido con la connivencia, al menos, de los últimos dos gobiernos municipales [el anterior de Patxi Lazcoz (PSE) y el actual de Javier Maroto (PP)], y la cosa es gravísima, porque los militares y los guardias civiles se han negado a abrir las puertas de sus instalaciones a los inspectores del Consistorio».

Belakortu preguntó «qué pasaría si cualquier ciudadano se niega a abrir la puerta a un inspector público».

«Es intolerable que cuando no se perdona ni un céntimo de euros a los gasteiztarras, a algunos se les exima de sus obligaciones, y el gobierno de Maroto tendrá que explicarnos en la próxima comisión de Hacienda por qué estos señores no pagan como los demás», añadió el concejal de Bildu.