Gorka Pintado es un futbolista experimentado, ya que ha pasado por bastantes clubes. Criado en las categorías inferiores del Arrobi Berri y Sporting de Herrera, llegó al Real Unión en la temporada 1999-2000 para pasar después por el Osasuna B, Leganés, Figueres, Gramanet, Granada y Swansea, antes de recalar en el AEK Larnaca, donde juega en la actualidad.

¿Cómo le va la vida en Chipre?

Muy bien. Estoy en un país maravilloso, con un clima excepcional, juego en una liga que es cada vez más competitiva y aspiramos a ganar el título. No me puedo quejar.

¿Y a nivel deportivo?

Tampoco me puedo quejar. Lo que un jugador quiere es jugar y lo estoy haciendo, y marcando goles, que es lo que se espera de un delantero. A nivel colectivo el equipo va primero, empatado con otros tres equipos y de los ocho partidos que hemos jugado, hemos empatado uno y hemos ganado siete.

¿Cómo le llegó la oportunidad de fichar por el AEK?

Jordi Cruyff, el que jugó en el Barcelona y en el Alavés, es el director general y era íntimo amigo del entrenador del Swansea, donde yo jugaba. A partir de ahí surgió el interés de Jordi por mí y vine a probar y la verdad es que me quedé encantado.

¿Tener como compañeros a más guipuzcoanos ayuda?

Por supuesto. Además, los tres vivimos en la misma urbanización y estamos mucho tiempo juntos, no solo nosotros, también nuestras mujeres. Luego también hay jugadores españoles y el idioma ayuda mucho y se hace más llevadero.

¿Qué nivel tiene actualmente la liga de Chipre?

Es una competición que cada año va a más. Se ha invertido en el fútbol y hemos venido muchos futbolistas extranjeros a jugar. Estamos unos cinco equipos que aspiramos a ganar la liga y tenemos un nivel muy parecido. Lo que hizo el año pasado el Apoel en la Champions no fue una casualidad.

¿En Chipre se vive con mucha pasión el fútbol?

Sí, la gente es muy apasionada. Si no es un partido muy importante no acude demasiada gente a los estadios, pero los que van no paran de animar. Siempre están cantando, animando, suele haber muy buen ambiente.

¿Y a nivel de medios?

La verdad es que no les hago mucho caso. Aquí se habla griego y yo no entiendo nada, por lo que no sé lo que dicen en la tele o en la prensa, aunque deben seguirnos bastante. Ahora mismo el equipo va bien y pienso que sobre nosotros se hablará bien.

¿A nivel económico como está el fútbol chipriota?

Se nota la crisis, pero no hay los problemas que hay en el fútbol español, donde hay muchos jugadores sin cobrar. De vez cuando puede haber algún retraso, pero cobramos bien y sin ningún tipo de problemas.

¿Cual es el principal objetivo del AEK Larnaca?

Luchar por el título y clasificarnos para una competición europea. Vamos a intentar ganar la liga, pero si no lo conseguimos intentaremos clasificarnos para la Europa League, que para nosotros es importante.

¿Viendo su trayectoria, no le da un poco de pena que en casa sea un desconocido?

Antes me daba más que ahora. Es cierto que en casa apenas me conocen y muchos ni sabrán de mí y eso antes sí me molestaba, pero cada vez menos. Yo he seguido mi camino, que además de para jugar al fútbol me ha servido para conocer a mucha gente, muchos lugares y culturas diferentes, por lo que ahora mismo estoy contento con lo que he hecho y no me preocupa demasiado lo demás.

¿No sería un buen reconocimiento a su trabajo que le llamase la Euskal Selekzioa?

Sí y además me haría mucha ilusión. Eso significaría que los técnicos de la selección se fijan también en futbolistas que están jugando fuera y en ligas no muy conocidas. Pero si no me llaman, tampoco pasa nada, seguiré trabajando igual, con la intención de ayudar a mi equipo, que es para lo que estoy.

¿Seguirá en Chipre?

Sí. Tengo 34 años y quiero continuar jugando al fútbol hasta que el cuerpo aguante y lo quiero seguir haciendo en Chipre. He encontrado un sitio perfecto para vivir y para jugar al fútbol de alto nivel y quiero seguir jugando donde estoy hasta la retirada. Espero que todavía me queden algunos años más para seguir haciendo lo que más me gusta hacer.