En su afán vigilante de las esencias patrias, la caverna a menudo cae en el ridículo. Nunca falta una muestra.

«El Mundo» ofrecía ayer una información titulada «El libro de estilo de EiTB abre la puerta a entrevistar a terroristas», en relación al borrador del libro de estilo que «contempla la posibilidad de que los periodistas de la casa entrevisten a `un miembro de un grupo terrorista'». Lo que ocurre es que EiTB ya ha entrevistado anteriormente a miembros de ETA, con buen criterio, en opinión de servidora. Y también lo hizo, en «Diario 16», un tal Pedro J. Ramírez, como otras y otros que han tenido la oportunidad de hacerlo. En fin, que lo que «El Mundo» quería vender como un escándalo resulta ser una birria.

Claro que, al menos, mantiene un equilibrio, porque de la noticia que ofrecía en la página adjunta lo más destacable era la mala baba: «Behatokia señala a Basagoiti por ser candidato a lehendakari sin saber euskara». Ya ven que no es que le critique o reproche su actitud, sino que le «señala». Aseguraba que el presidente del PP vasco ha recibido una reclamación porque, «en su condición de candidato a lehendakari, no es `euskaldun'». A servidora le parece de lo más normal que quien pretenda ser presidente de una comunidad sepa el idioma original de la misma. Eso sí, «Basagoiti ha defendido con reiteración que el euskera debe ser `un punto de encuentro y entendimiento entre los vascos'». Ya, pero le da reparo llegar a ese punto y practica aquello de «pasa tú primero, que a mí me da la risa». Pero lean lo que dice de la «presunta fundación lingüística» el diario al que tan mal le parece que se «señale» a la gente: «Behatokia, que se autodefine como un `observatorio de derechos lingüísticos' y que está conformada por grupos cercanos a los terroristas de ETA encarcelados, justifica el envío de este `expediente' en una reclamación realizada por un ciudadano anónimo». Ciertamente, Behatokia recibe multitud de reclamaciones de ciudadanos que perciben la vulneración de sus derechos lingüísticos. Pero «El Mundo» ha «descubierto» que la labor de Behatokia es «Un objetivo encomendado por las organizaciones cercanas a ETA que impulsan este observatorio aunque en su página web se presentan como `organizaciones vascas defensa de los Derechos Humanos'». Es que si esperamos la defensa de «El Mundo», ese que se autodefine como un medio de comunicación y se presenta como «líder mundial de la información en español»...