Atentados y combates se multiplican en los barrios de Damasco
GARA |
Los escenarios de guerra en Damasco habían sido eclipsados por el frente abierto en julio en Alepo, la segunda ciudad siria, pero la estrategia del régimen de asegurar su control de la capital como centro de legitimidad ha aumentado los enfrentamientos y la insurgencia armada multiplica allí sus atentados.
En las últimas 48 horas varios atentados han matado al menos una treintena de civiles en el barrio de Qudsaya y en el de Mazze, dos zonas con población mayoritariamente alauí. La insurgencia ha tomado así a esta comunidad como objetivo de sus ataques identificándola con el régimen sirio. En cambio, la televisión siria desmintió que el palacio presidencial el aeropuerto militar de Mazze y la sede de los servicios de inteligencia hubieran sido bombardeados, como afirmó la oposición.
También el barrio de Hajar al Asuad y el campo de refugiados palestinos de Yarmuk han sido escenario de combates que han enfrentado entre sí a los propios palestinos. Al menos diez miembros del FPLP-Comando General, partidarios de Al Assad, murieron en los enfrentamientos.
El Ministerio sirio de Exteriores advirtió de que evitará cualquier intento de involucrar a los palestinos en la crisis siria. Según la oposición, tan solo en Damasco y alrededores murieron ayer al menos medio centenar de personas.
En el resto del país el Ejército intensifició los bombardeos aéreos y continuaron los enfrentamientos en Alepo, donde la oposición aseguró haber derribado un caza.
Por otro lado, Turquía afirmó que está discutiendo con la OTAN un eventual despliegue de baterías de misiles tierra-aire y de antimisiles Patriot en su territorio.
Por su parte, el opositor Consejo Nacional Siriio (CNS) eligió ayer en Doha su nueva dirección, que presentará hoy con la intención de obtener mayor respaldo internacional.