IKER VILLA | VOCAL DE HERRI OIHUA
«Ver la transformación del grupo y las canciones ha resultado muy satisfactorio»
En la situación actual de tierras movedizas, con todas las estructuras transformándose, con la cantidad de grupos que buscan un hueco en el escenario, resulta difícil que un grupo despunte a la primera y consiga una buena posición. No obstante, si de potencial se trata, Herri Oihua, de Barakaldo, demuestra, por muchas razones, que puede ser una sólida y emergente propuesta.
Pablo CABEZA | BILBO
Herri Oihua es un proyecto iniciado en mayo de 2011 por cinco jóvenes de Barakaldo con motivaciones diferentes (metal y hip hop) en lo musical, pero que han sabido canalizar en un estilo que tampoco es extraño a la música: la fusión de ambos géneros. Tras unas cuantas actuaciones significativas este año: fiestas de Barakaldo, Atzekaldeta Fest 2012 o fiestas de Rontegi, la banda contacta con Gaua Produkzioak. Gente muy seria, coherentes, sensibles y con amplios conocimientos en todos los planos de la música: desde estudio de grabación, producción, arreglos, asesoramiento... a discográfica.
Ayer llegaron las primeras copias de «Arjona» (El comiendo de algo). Distribuidas con inquietud y nervios por diferentes locales de Barakaldo, llevan ya vendidas cerca de 200 copias en unas horas. el disco también se puede localizar por medio de su página en Facebook y Elkar lo distribuirá por sus tiendas en menos de doce días.
«Arjona» es uno de los debuts más sólidos que hemos escuchado en mucho tiempo y, además, realizado por un quinteto que oscila entre los 17 y 19 años. De ellos son las canciones, la entusiasta actitud y el aura que emiten, pero Gaua Produkdioak y Asier Zubelzu ha realizado un trabajo extraordinario. Su talento y veteranía ha supuesto el complemento ideal para unos jóvenes con cierta y lógica indefensión ante el estudio, los arreglos o sus posibilidades.
Herri Oihua actuará en Azoka de Durango el 7 de diciembre a las 19.30. Buena jornada, puesto que después de ellos presentará su nuevo disco Willis Drummond, una de las bandas más apreciadas y sugerentes de la escena de Eusakl Herria.
Iker Villa, voz (y alboka) junto a Iker Aginaga escucha música desde pequeño y de todo: de Víctor Jara a Neil Young. Su interés por la música inflexiona en 2007, cuando comienza a componer sus primeras canciones junto a Aginaga, «letras con contenido socio-político para encajar sobre bases instrumentales». Poco después forman Revolta Permanent, banda que se centraba en el hip-hop. Tras un año de ensayos, comienzan las actuaciones, todas con muy buena aceptación. «Los dos teníamos dentro una chispa rockera que no conseguía prender la yesca, hasta que conocimos a los demás integrantes de Herri Oihua, fue entonces cuando la chispa se hizo llamarada».
A Iker Aginaga le introduce en la música su padre con discos de Canned Heat, Led Zeppelin, Ten Years After, Leño, Rosendo, Barón Rojo..., que sirven para incitarle musicalmente.
A Mikel Becerra, guitarra, es su hermano el que le pervierte con sonidos de Metallica, Iron Maiden, Black Sabbath... Gardenia fue su primer grupo.
Aritz Monedero, bajo,posee una formación clásica debido a su abuelo. Posteriormente escucha o descubre cedes de Mike Oldfield, Led Zeppelin y todo lo que «incauta» a sus tíos. Ahora es más de Queens Of The Stone Age, Neurosis o Kylesa. Comienza a tocar con una guitarra de dos cuerdas recuperada de un desván. Su tío Iñaki, que tocaba en un grupo en sus tiempos mozos, termina por facilitarle un instrumento en condiciones. Fue también componente de Gardenia.
Lander Gormedino es el más raro en sus inicios: el txistu, que de algo le valió, ya que se escucha en uno de los mejores temas del disco debut. Hace tres años empieza a tomar clases de batería en Hala Dzipo. Lander es el que más se ha tenido que reciclarse, ya que sus grupos preferidos eran bandas como La Polla, Barricada, Piperrak..., discos de su hermano.
¿Destacadas? El álbum es tan completo y equilibrado que resulta innecesario sobreponer unas sobre otras, pero «Lur zairitua», de excelente inspiración melódica y crudeza musical o «Azkenako» son puro filo. «Es gaude salgai» es de las más metálicas, muy destellante. «Harrobia» y «Lur zauritua» conectan con el stoner, como «Zauria», donde colabora Haritz Lete (Cobra, Kokein). «Harrobia» es de las más curiosas, mucho trabajo de producción, más lenta, pero vaya himno. Y luego «Martxa baten lehen notak 1», de Mikel Laboa y Joxean Artze. Espléndida versión que cuenta con el permiso de Marisol Bastida, viuda de Laboa, quien siempre se mostró cercana y dispuesta. Le deben un disco.
¿Con su juventud, es un sueño dar vida a un disco, tal y como tienen,a demás, esas bandas que les iniciaron?
Todo disco supone un trabajo y una dedicación enorme, en nuestro caso, con nuestra juventud y desconocimiento del proceso de grabación, aún ha sido más duro, tanto para nosotros como para Asier, «El Jefe» (productor del disco). A pesar de ello ver la transformación del grupo, los integrantes en sí, y de las canciones, todo ha resultado muy satisfactorio, en gran parte gracias a las horas que ha metido Asier y las facilidades y consejos que nos ha dado. «Arjea" ha supuesto un proceso de aprendizaje y entendimiento de la música en una dimensión que desconocíamos. Otro factor del disco que nos ha sorprendido es el poder comparar nuestro trabajo al de grupos que creíamos inalcanzables en calidad de sonido, y darnos cuenta de que no están a años luz.
¿Qué les desconcierta más de todo lo que estan viviendo?
Este proceso, desde su inicio hasta el día de hoy, ha sido un desconcierto general, como esperábamos, ya que todos y cada uno de los pasos que hemos dado desde la formación han sido nuevos y desconocidos. Pero para las diversas dudas contamos con la gente de Gaua.
¿Qué tal se ha llevado el equilibrio entre el hip-hop/rap y el metal?
Partimos de que los cantantes ya tenían el concepto del hip hop a la hora de cantar y componer. Los músicos poníamos una base musical más basada en rock-metal. La fusión fue sin traumas. Aunque con varias canciones probamos con más cosas, ya no hay tanto rap, hay más partes melódicas y las canciones toman otro sentido más natural, pero con el mismo gancho y la misma pegada.
Han escuchado de todo, pero qué es lo que ha quedado en el poso...
Tenemos influencias de muchos grupos, tanto en música como en letras. Musicalmente nos han «guiado»Rage Against The Machine, Faith No More, Queens of the Stone Age, Black Sabbath [«Harrobiak», «Zauria»], Berri Txarrak, Cobra... Con las letras defendemos nuestro objetivo de defender nuestro idioma y cultura. Miramos a Mikel Laboa, Gabriel Aresti, Joseba Sarrionandia... Y en el rap grupos como Violadores del Verso, 121Krew, Selektah Kolektiboa (creadores del genero musical que llamamos euskal rap), Norte Apache, Kodigo Norte... .
¿Agobiados durante la grabación?
Esperábamos un ambiente mas serio y de mas trabajo, es decir, teníamos los huevos de corbata, pero como somos unos bandarras, y "El Jefe" supo llevarnos a un ambiente sin presión, la tensión desapareció nada mas llegar al estudio. Lo mas duro sin duda fue el darnos cuenta de que lo que creíamos que iba bien, no iba tan bien. No teníamos los medios necesarios para ensayar decentemente, y lo que oíamos no era realmente lo que hacíamos. Al llegar al estudio pudimos escuchar lo que salía de los amplis y de las gargantas, y nos dimos cuenta de que tenia algunos errores a pulir, sobre todo en cuanto a la técnica de canto en estudio, donde Asier nos exprimió a más no poder, siendo capaces de hacer cosas que jamás hubiésemos imaginado.
¿La experiencia de grabación se la imaginaban como ha sido?
Esperábamos un ambiente más serio y de más trabajo; es decir, teníamos los huevos de corbata, pero como somos unos bandarras, y «El Jefe» supo llevarnos a un ambiente sin presión, la tensión desapareció nada más llegar al estudio. Lo más duro fue darnos cuenta de que lo que creíamos que iba bien, no iba tan bien. No teníamos los medios necesarios para ensayar en local decentemente, y lo que oíamos no era realmente lo que hacíamos. Al llegar al estudio pudimos escuchar lo que salía de los amplis y de las gargantas, y nos dimos cuenta de que había que pulir algunas cosas, sobre todo en cuanto a la técnica de canto en estudio, donde Asier nos exprimió a más no poder. Pero gracias a este trabajo y perseverancia, fuimos capaces de hacer cosas que jamás hubiésemos imaginado.
¿Compremetidos?
Viviendo donde vivimos y en la situación en la que estamos hoy en día política, económica y socialmente, tendríamos miles de canciones. En este primer disco esta temática es notable; sin embargo, en lo que ya estamos creando, para un futuro, ponemos más atención y no somos tan explícitos. Elaboramos más nuestras letras, más metáforas y mensajes implícitos, pero dejando siempre nuestra crítica presente.
¿Se critican, se desechan canciones?
No hemos desechado nada, creemos en lo que hacemos y damos prioridad a la primera toma. Pero siempre hay canciones que nos gustan más que otras y algunas que son más especiales, es inevitable.