RECOPA (3ªRONDA)
Rubio puso el ritmo, y Zoqbi el muro
Eider Rubio marcó el ritmo de juego más vivo que le conviene a Bera Bera, y Zoqbi contribuyó en una fabulosa segunda mitad, con un 67% de paradas.
DANUBIUS GALATI 19
BERA BERA 22
Juan Carlos ELORZA
El 12-13 que señalaba el marcador al descanso en Bidebieta reflejaba exactamente la misma ventaja que Bera Bera había obtenido al final del primer tiempo el sábado en el Gasca, pero las sensaciones eran muy diferentes. Bera Bera se pareció mucho más a sí mismo desde el primer minuto, asumiendo más riesgos que el día anterior, y la mayor velocidad que imprimió al juego desbarató los planes del Galati. Rubio se desquitaba de su gris actuación del Gasca y puso un ritmo trepidante, bien secundada por Menéndez -que ha dado un paso adelante este fin de semana con dos actuaciones sobresalientes-, que permitió a las donostiarras dominar en el marcador, aunque los postes -5 en la primera parte, 7 en el partido, para un total de 11 en la eliminatoria- y los penaltis fallados -dos más ayer- volvieran a lastrar su despegue definitivo.
El Galati, que introdujo jugadoras de refresco en su alineación inicial, iba de más a menos. Empezó muy bien su extremo zurda Gheorghe, que marcó tres de los seis primeros goles en el primer cuarto de hora, dos de ellos en desdoblamientos a doble pivote, pero poco después hizo penalti sobre Eli Pinedo, agarrándole del brazo cuando ya saltaba en solitario, y los árbitros la descalificaron directamente, en una acción que muchas veces se sanciona con una exclusión de dos minutos, pero recogida en el reglamento como causa de descalificación.
El Galati notó su ausencia, porque jugadoras que brillaron el sábado bajaron su rendimiento ayer, como la portera Bobeica -que acabó sustituída-, la pivote Lazarin -a quien la defensa cerró mejor las líneas de pase-, o su goleadora Glibko, que ayer se topó con una genial Zoqbi (14 paradas de 21 remates en la segunda parte -67%-, dos de ellos de penalti a la propia Glibko).
La segunda mitad empezó muy peleada, con empate a 16 en el minuto 6, al que siguieron dos remates a la madera de Rubio y Menéndez, y el inicio del recital: doble parada de Zoqbi a Glibko y Cioaric -que cogió el rechace- en la misma jugada.
Eli Pinedo -reconvertida en lanzadora de penaltis-, Menéndez -culminando un contraataque tras gran pase de Rubio-, y Ziarsolo -con dos remates desde el extremo-, materializaban un parcial de 5-0 (16-21) que sentenciaba la eliminatoria, mientras Zoqbi levantaba un muro ante su portería donde se estrellaba el Galati y, sobre todo, Glibko.
Con 16-20 llegó el súmmum: paradón de la brasileña al penalti lanzado por la ucraniana, que recogía el rechace, y nuevo paradón a bocajarro sin haberse incorporado todavía completamente del suelo. Tres minutos después un balón largo al contraataque dejaba sola a Glibko ante Zoqbi, que volvía a rechazar su remate a placer, y aún le pararía otro penalti, y un contraataque más a Marginean.
