«Hay que buscar el dinero donde está y gravar el gran capital»
Los sindicatos portugueses convocan para mañana, 14 de noviembre, un día de huelga general en coordinación con la jornada de movilizaciones de otros países europeos. Los convocantes resumen los motivos del la protesta sindical en su lema: «Contra la explotación y contra el empobrecimiento».
Mikel GOÑI | LISBOA
Las medidas de austeridad impuestas a Portugal por el Banco Central Europeo (BCE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE) son la razón para la convocatoria de huelga general de mañana por parte de los sindicatos portugueses. Armando Farias (Castelo Branco, 1951) es miembro de la Comisión Ejecutiva de la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP), y cree que la aplicación de las medidas de la troika agravará la situación. Su sindicato, que es el mayoritario del país y principal convocante de la movilización, ha propuesto también un programa alternativo a los recortes.
¿Cuál es la situación de Portugal, para que ustedes hayan convocado una huelga general? ¿Tiene que ver con el rescate financiero?
El problema viene de atrás, porque no se han hecho las inversiones necesarias. Por ejemplo, los sectores siderúrgico, pesquero o de la agricultura se destruyeron cuando Portugal entró en la Comunidad Europea. Los fondos que llegaron para reestructurar la economía no se usaron para eso, se fueron a la corrupción o inversiones megalómanas, tales como estadios de fútbol. Durante la década pasada, estos problemas se agudizaron, y a la concentración de los grandes grupos económicos se unió la especulación financiera. Portugal se quedó sin dinero, y se empezó a hablar del rescate. Nosotros advertimos de que si seguíamos así, cada vez nos encontraríamos peor. Y así ha sido, porque el rescate, que nosotros consideramos un préstamo con usura, se ha utilizado para pagar intereses y otras cosas, pero no para activar la economía.
¿Cómo afecta eso a los portugueses?
Las medidas de austeridad han traído bajadas de salarios, subidas de impuestos y una reducción del Estado de bienestar. También hay una destrucción de empleo masiva. Los datos oficiales dicen que el paro es del 16%. Nosotros creemos que llega al 24%, puesto que ellos solamente cuentan el paro registrado. No tienen en cuenta a las personas que ya no están dadas de alta porque no cobran ningún subsidio, ni a las personas que han emigrado. Calculamos que hay 1.400.000 desempleados, porque también contamos a los que tienen trabajos muy precarios. Es el resultado de los sucesivos cambios que han hecho en la legislación laboral que facilita los despidos. Hoy estamos peor que hace un año, debido a esas medidas de austeridad. Las clases más bajas son las que más sufren, y, por ejemplo, la diferencia de salario entre hombres y mujeres se ha incrementado.
¿Cuáles son los motivos concretos para la convocatoria de huelga general de mañana? ¿Y sus objetivos?
El lema de mañana recoge los motivos: Contra la explotación y contra el empobrecimiento. Entre otras cosas, las medidas de austeridad prevén 20 días más de trabajo al año, por el mismo sueldo. Todo eso se está debatiendo ahora con el presupuesto general, y por eso hemos convocado la huelga en este momento. Ante eso nos planteamos tres objetivos también concretos. Por un lado suspender el memorando de entendimiento con la troika que componen el FMI, el BCE y la UE. Por otro lado, buscamos la renegociación de la deuda asociada al rescate. También buscamos cambiar, no solo de gobierno, sino también las políticas del gobierno; los gobiernos de las ultimas décadas han traído la alternancia de los partidos, pero no alternativas de gobierno.
La CGTP, a la vez que su convocatoria de huelga, ha hecho público un programa con medidas concretas para mejorar la economía del país. ¿En qué consiste?
Con esas medidas buscamos mostrar que se puede gobernar de otra forma, y se pueden resumir en dos. Hay que buscar el dinero donde está, hay que gravar al gran capital, que apenas paga impuestos, o incluso no paga ninguno.
Los recortes hay que hacerlos en el despilfarro; por ejemplo, en el número de altos cargos de los consorcios público-privados que se han puesto en marcha para la creación y explotación de infraestructuras.
En ese programa se incluye una petición para el BCE...
Planteamos que el BCE le preste dinero directamente a los estados. Un problema común a la mayoría de los países europeos es que el BCE no presta dinero directamente a los estados. Éste le presta a los bancos con un interés aproximado del 0,75%, y ellos se lo prestan luego, si es que se lo prestan, a los estados, al 5%, al 6% ó al 7%. Ganan millones y millones a costa de todos nosotros.
La convocatoria de mañana coincide con más llamamientos a la movilización y la huelga general en otros países europeos. ¿Tienen los europeos más problemas económicos comunes?
No hay posibilidad de mantener la moneda única si el desarrollo económico continúa siendo desigual entre los países del centro y norte de Europa y los periféricos. Se necesitan políticas que tengan en cuenta las situaciones diferentes de los distintos países, por ejemplo, en cuanto al déficit público. Aún así, no creemos que haya que salir del euro.
En la izquierda política portuguesa hay quien cree que la derecha está aprovechando la crisis para «ajustar cuentas» con la Revolución de los Claveles de 1974 y echar atrás los avances sociales que trajo. ¿Comparte la CGTP esa visión?
Los ataques a esos avances no han empezado ahora. Casi de inmediato atacaron a la reforma agraria, que tuvo muchísima importancia. Luego atacaron a las empresas públicas... Ahora, quieren darle el último hachazo a aquellas conquistas. Mucha gente cree que estamos a salvo de una dictadura porque hay elecciones, libertad de opinión y estamos dentro de Europa, pero se ven ciertos tics, ciertas situaciones de represión.
«Proponemos suspender el memorando de entendimiento con la troika, buscamos la renegociación de la deuda y cambiar las políticas del gobierno»