Solo el Larvik noruego se ha sumado el pasado fin de semana al trío de equipos que ya se habían asegurado el pase para la siguiente fase de la Champions League (las húngaras de Györi y Ferencvaros, y las rumanas del Oltchim).

También son fijos tres de los últimos de cada grupo, que quedarán eliminados y no podrán reengancharse en otra competición (el Viborg danés, el U Jolidon rumano y el Buxtehuder alemán). El IK Sävehof sueco -que ocupó la plaza a la que renunció Itxako-, tiene una mínima posibilidad, ya que visita la pista del Dinamo Volgogrado en la última jornada y debería superar el 28-34 que le endosaron las rusas en su propia pista en la primera vuelta. Si no lo logran, las suecas quedarían fuera y el Dinamo sería 3º del Grupo C, entrando en el sorteo de octavos de la Recopa.

El resto se decide en la última jornada. En el Grupo A la segunda plaza se juega en el Randers-Hypo NÖ. Las austríacas parten con ventaja de dos puntos (6 por 4 del Randers), y las danesas necesitarían un tanteador favorable superior al 32-25 de la ida en Austria. Uno de ellos seguirá adelante y el otro entrará en el bombo de octavos de la Recopa.

En el Grupo C se vive una situación similar, con el Podravka croata con 6 puntos y el Krim esloveno con 4, y partido decisivo entre ambos en pista eslovena. Aunque en este caso la desventaja que debe remontar el Krim es algo más asumible, un 25-22 en la ida.

En el Grupo D la igualdad es tal que lo más probable es que la liguilla acabe con triple empate a 8 puntos entre el Buducnost macedonio, el Zvezda ruso y el Thüringer alemán -quien peor diferencia de goles tiene en los choques entre los tres-. El Buducnost (6 puntos) recibe al descartado Viborg, mientras el Zvezda (líder con 8) visita al Thüringer (6).