Buscan «una marea humana por los derechos humanos» el 12-E en Bilbo
La iniciativa Herrira, junto con una veintena de personas referenciales de distintos ámbitos sociales, presentó ayer oficialmente la convocatoria de la manifestación del próximo 12 de enero. Llaman a reunir en las calles de Bilbo «una marea humana» por el respeto a los derechos humanos» de quienes siguen sufriendo las consecuencias del conflicto, los presos, refugiados y sus familias y allegados, para avanzar hacia la solución.
Nerea GOTI | BILBO
Veintidós ciudadanos vascos, entre los que se encuentran personas referenciales de distintos ámbitos como la cultura, el deporte, la universidad, el periodismo o los movimientos feminista e internacionalista, son los promotores de la movilización que el próximo 12 de enero pretende «llenar las calles de Bilbo, para que esa marea humana se convierta en una ola que haga llegar hasta Madrid y París las voces de miles de vascos y vascas en favor de la solución».
En una comparecencia ayer ante los medios de comunicación, la doctora Esther Compains y la exjugadora del Athletic Eba Ferreira expresaron en euskara y castellano, en nombre del grupo de promotores, algunas de las reflexiones que impulsan el llamamiento a la ciudadanía a protagonizar el 12 de enero una movilización masiva. Revelaron que partirá a las 17.30 horas de La Casilla y será silenciosa. Todo ello, en demanda del respeto a los derechos humanos para avanzar en la solución al conflicto.
El lema de la manifestación será «Giza eskubideak. Irtenbidea. Bakea. Euskal Presoak Euskal herrira/Derechos humanos. Solución. Paz. Presas y presos vascos a Euskal Herria». Resaltaron que términos como derechos humanos, solución y paz son palabras que «despiertan la ilusión y la esperanza de la ciudadanía de este pueblo en la solución del conflicto, como las han despertado en numerosos pueblos a lo largo y ancho del mundo». Y recordaron que, «tras largos años de sufrimiento», se han producido acontecimientos en Euskal Herria que «nos permiten entrever destellos de luz al final del túnel y soñar con nuevas oportunidades».
En ese contexto, hicieron un emplazamiento directo a la sociedad vasca a «construir una paz basada en los derechos humanos» y destacaron que «es responsabilidad de todos y todas impulsar el proceso abierto y fomentar la hoja de ruta», en referencia expresa al camino trazado en la Conferencia Internacional de Paz de Aiete y la correspondiente decisión de ETA de abandonar definitivamente la lucha armada.
A juicio de los promotores, que impulsan la movilización en el seno de Herrira, para avanzar hacia la solución «es imprescindible centrar la atención en la situación de los ciudadanos y ciudadanas que a causa del conflicto están en prisión o en el exilio». Subrayaron, en este sentido, que aún hay personas dispersadas a cientos de kilómetros de Euskal Herria y que «eso tiene consecuencias muy graves, tanto para las y los propios presos y exiliados como para sus familiares y allegados».
Ante esta vulneración de derechos, los promotores de la marcha hicieron un emplazamiento a los gobiernos español y francés a «actuar con responsabilidad», avanzando en la solución del conflicto «en un momento histórico» mediante la aplicación de los derechos humanos. Para ello, los impulsores de la manifestación establecieron cuatro puntos de la demanda dirigida a ambos estados.
Canción y aportaciones
Así, reclaman el traslado los presos y exiliados vascos a Euskal Herria, la puesta en libertad de los reclusos con enfermedades graves y la derogación de la legislación excepcional que permite la prolongación de las condenas, así como las medidas que pueden conllevar la cadena perpetua, junto con la demanda de respeto a «todos los derechos humanos que les corresponden como presos y como personas».