Mikel INSAUSTI

Choca bastante que la distribuidora European Dreams Factory, dedicada preferentemente al cine religioso y ultracatólico, estrene una película indie hecha por una joven realizadora, que bien podría ser la sucesora natural de Isabel Coixet. Una vez vista la ópera prima de Ana Rodríguez Rossell, se comprende la conexión oculta tras la extraña asociación. «Buscando a Eimish» es una oda a la familia conservadora, adaptada a los gustos del pijerío de look moderno, cuya ideología, si es que la tiene, no es muy progresista que se diga.

La autora dice haberse inspirado en el melodrama romántico irlandés «Once», caracterizado por sus canciones intimistas. Ese trasfondo musical está presente también en «Buscando a Eimish», pero el tipo de personaje al que da vida la actriz Manuela Vellés canta como Russian Red (nombre artístico de Lourdes Hernández), que hace campaña para las juventudes del PP. El tema «Parking Spaces» que interpreta con el grupo Nine Stories de Nacho Ruiz se hermana con «Things We Almost Had», en la voz de Alondra Bentley, otra cantautora igual de sosita.

Como quiera que en un papel secundario aparece el actor germano-turco Birol Ünel, habitual del cine de Fatih Akin, cabe pensar en una road movie europea en la tradición de Wim Wenders, más aún cuando el viaje del coprotagonista en pos de la chica del título pasa por Berlín, camino de Verona. Y en apariencia lo es, ya que Ana Rodríguez Rossell maneja bien la narrativa con saltos temporales, haciendo presente el pasado de cada uno de los componentes de la pareja en crisis mediante el recurso del flash-back.

Lo que no convence es la trayectoria moral que se quiere describir, ya que la misteriosa y repentina huida de Eimish (nombre que en berebere significa «utopía»), se revela a modo de toque de atención para su compañero sentimental. Al seguirla a través del viejo continente, él terminará por aprender la lección de compromiso que ella, más madura, quiere brindarle. Así es como comprenderá la necesidad vital de la chica para ser madre y formar una familia estable.