Ansar Dine, uno de los grupos islamistas armados que tomaron el control del territorio tuareg de Azawad, al norte de Mali, declaró a AFP ayer que renuncia a imponer la sharia (ley islámica) en todo el país, pero defendió su derecho a aplicarla en su único bastión de Kidal. «Solo queremos la aplicación de la sharia en las zonas bajo nuestro control, es decir, en la región de Kidal. Todo se hará con pedagogía, y vamos a presentar nuestros argumentos a los negociadores de la otra parte», en referencia a las autoridades malienses de transición, indicó Mohamed Ag Aharib, portavoz de la delegación que negocia en Uagadugu.